Las recetas de la abuela triunfan

La empresa Fruits S&P, especializada en la preparación de salsas y cremas desde hace más de veinte años, ha hecho de la 'elaboración cotidiana' su sello. Está a punto de comenzar a exportar.

19 mayo 2017 16:07 | Actualizado a 21 mayo 2017 14:09
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Una buena crema de calabaza empieza pelando las verduras y cortándolas a dados antes de meterlas en la olla y sumergirlas en agua. No hay otra forma de conseguir el mismo sabor si no es siguiendo la receta tradicional de las abuelas. Esta calidad de «elaboración cotidiana» ha sido la clave del éxito de la familia Sans, que ha conducido un negocio que empezó en la despensa, en una empresa con 35 trabajadores, que está ultimando los preparativos para empezar a exportar sus salsas, cremas y preparados de verduras.

Fruits, S&P ha crecido siempre con nuevos productos y variedades. Ahora mismo ya está probando una nueva línea con verduras ecológicas. Será uno de los ejes sobre los que se sostendrá la estrategia de internacionalización de la empresa, que inicialmente se fija en el mercado europeo, y que cree que podrá empezar a explotar a partir del año que viene. Sin embargo, antes de salir al exterior, esta sociedad tiene dos retos: conseguir productos estables a temperatura ambiente con una caducidad más larga y obtener la certificación alimentaria.

Francesc Sans, jefe de administración de la compañía, describe que «el producto es completamente natural por lo que ahora mismo la mayoría de éstos tienen una caducidad de entre ocho y noventa días. Esto nos frena en el momento de salir al exterior. Tenemos que conseguir alargar este tiempo».

El catálogo de productos de esta empresa ubicada en el Alt Camp ha crecido paulatinamente a lo largo de su trayectoria. Los preparados de judías verdes con patatas y la menestra de verduras representan las dos últimas variaciones que han incorporado antes de que lo hiciera la tortilla. Con estos tres últimos platos, la compañía suma ya un total de 85 referencias que corresponden a 25 productos diferentes.

Francesc Sans explica que el secreto está en «elaborar como si te prepararas la comida en casa. No utilizamos productos deshidratados ni se ha automatizado ninguno de los sistemas. Seguimos haciendo la cocina de toda la vida».

Una materia prima fresca y la producción artesanal son las dos banderas de una compañía que en 1994 constituyó Jaume Sans. Comenzó elaborando preparados a partir de verduras, siendo las brochetas vegetales o el preparado para el caldo, algunos de sus primeros platos.La demanda se disparó con la salsa de romesco. En este caso la familia adoptó la receta de la madre, Isabel Planas, que tuvo una gran acogida a medida que la calçotada ganaba cada vez más popularidad hasta convertirse prácticamente en «deporte nacional».

Crecimiento progresivo

Ya en 2006, la despensa familiar había quedado pequeña. La empresa se trasladó a una nave de 400 metros del polígono industrial que, posteriormente en una nueva fase, se añadió un segundo inmueble hasta ocupar los cerca de 1.700 metros cuadrados que tiene la compañía en la actualidad.

Ésta ha necesitado más espacio a medida que ha crecido también su catálogo de productos. La salsa de romesco abrió la puerta al allioli y a la salsa pesto. Pese a ello, la que acompaña a los calçots o al xató sigue siendo el producto estrella.

La producción anual es de 112.000 kilos al año y, junto con el gazpacho (215.000 litros anuales), son los preparados que tienen más demanda. Por su parte, la producción de allioli es de unos 39.000 kilos anuales.

Con una facturación de 2.380.000 euros el año pasado, la compañía experimenta un crecimiento anual medio de entre el 10 y el 15%, por lo que espera llegar a un volumen de negocio de 2,5 millones cuando acabe este ejercicio.

Comentarios
Multimedia Diari