La Confederación Española de Hoteles y Apartamentos Turísticos (CEHAT) pidió ayer que se realicen pruebas de coronavirus en origen y destino a los viajeros y se ha ofrecido a financiar los test a la salida de sus establecimientos en España.
En un comunicado, la patronal de los hoteleros españoles muestra «su sorpresa y decepción» por la decisión de Reino Unido de imponer dos semanas de cuarentena a los viajeros que regresen de España, y solicita que se adopten medidas en el ámbito europeo. Con la imposición sorpresiva de una cuarentena británica, se corre el riesgo de que otros gobiernos adopten soluciones similares de forma poco reflexionada y sin obedecer a la situación real que tenemos en España y, especialmente, en las zonas turísticas peninsulares y los archipiélagos balear y canario, advierten.
«Debemos pedir que las decisiones se adopten en base a criterios objetivos de evolución de la seguridad sanitaria y exigir responsabilidades a medidas imprudentes que pueden ocasionar graves perjuicios al turismo y, especialmente, a los hoteleros, que están cumpliendo con los protocolos más exigentes de toda Europa», apunta Jorge Marichal, presidente de CEHAT.
Una situación que para la confederación empresarial no sólo es injusta sino, también, totalmente ilógica y poco rigurosa.