Los reincidentes con el alcohol y las drogas perderán el carné de conducir

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha tomado medidas drásticas para frenar el aumento de la muerte de ciclistas en la carretera. El consumo de alcohol y drogas y el respeto a la normativa ante la presencia de ciclistas son el centro del plan especial de vigilancia que se ha puesto en marcha.

El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, mostró ayer su «preocupación» por la muerte de 18 ciclistas en lo que va de año, tres más que en el mismo periodo de 2016. Estos deportistas perecieron en unos siniestros en los que varios conductores dieron positivo en alcohol y drogas. De esta manera y dentro del plan especial de protección y seguridad para vías ciclistas, Zoido anunció que los conductores reincidentes con sanciones de alcohol y drogas –aquellos que tengan dos o más sanciones en un periodo inferior a dos años–, perderán el permiso de conducir por «falta de aptitudes psicofísicas».

Tratamiento médico
De esta manera, serán los médicos los que tendrán que fijar si los infractores deben ser sometidos a un tratamiento de desintoxicación. Este procedimiento está recogido ya en el artículo 36 del Reglamento de Conductores y se aplica a las personas que están bajo un tratamiento médico que puede reducir las capacidades para ponerse al volante. También son objeto de esas medidas los conductores que por su edad o por padecer enfermedades degenerativas sufran una acusada perdida de facultades.

Asimismo, la DGT no quiere dejar que queden impunes los conductores ebrios o drogados que provoquen un accidente. En estos casos, según explicó el titular de Interior, si el juez acuerda el archivo de la causa penal, Tráfico incoará el correspondiente expediente sancionador contra el infractor por circular bajo los efectos del alcohol y las drogas. «Se trata de que los conductores vean y comprueben que la administración funciona», subrayó Zoido.

También por aire
En la campaña de protección a los ciclistas también tomarán parte los helicópteros de la DGT, que actuarán de manera coordinada con las patrullas de la Guardia Civil para notificar in situ las infracciones a sus autores.

De manera paralela, la DGT está trabajando para confeccionar un mapa completo de las vías interurbanas más utilizadas por los ciclistas. En la reunión se recordó que desde el principio de año se han señalizado 56 rutas seguras para ciclistas y otras 49 nuevas rutas están pendientes de balizar. En ellas se han instalado señales de advertencia que incluyen limitaciones de velocidad durante días y horarios concretos.

Para mejorar la seguridad también se estudiará la puesta en marcha de señales ‘inteligentes’ de advertencia de ciclistas y marcas de separación de 1,5 metros sobre el asfalto, la distancia mínima de seguridad para que un vehículo adelante a un bicicleta.

Desde la DGT recuerdan que ante la presencia de un ciclista «hay que reducir la velocidad». Al tratarse de carretas convencionales, para rebasar al ciclista y mantener la distancia mínima de separación «se puede pisar la línea continua siempre y cuando haya visibilidad y no venga ningún coche en sentido contrario». También recordaron que está prohibido el adelantamiento a cualquier tipo de vehículo cuando en sentido contrario circule un ciclista.