Jamás un plato de pasta había salido tan caro a estas dos turistas japonesas. Y sino, que se lo pregunten a ellas. Estaban pasando unos días en Roma y, como cualquiera de nosotros habría hecho, decidieron comer un plato de espaguetis, ese manjar tan típico de Italia. Lo que no se esperaban era que cada espagueti les costaría un ojo de la cara: el total, 349,80 euros, más otros 80 de popina (no sea caso). Bueno, hay que matizar que este precio incluye dos platos (que además llevan marisco) y dos botellas de agua. Da igual, a caro no le gana nadie.
El restaurante en cuestión (lo advertimos por si alguien tiene pensado ir de vacaciones a Roma...) es el Antico Caffè di Marte. Ahí queda dicho.