Seis de cada cien siniestros de coche en Tarragona son intento de fraude

Seis de cada cien(5,7%) siniestros de seguros del automóvil en Tarragona son un intento de fraude. Además, la cuantía media de intento de estafa en Tarragona ronda los 772 euros, según el tercer barómetro del Fraude en el Seguro de Autos de Línea Directa.

Con un 6,3%, Barcelona es la séptima provincia española donde más fraude se registró en los dos últimos años. El resto de provincias catalanas se sitúan por debajo de la media estatal, con seis de cada cien partes: Tarragona (5,7%), Girona (5,1%) y, por último, LLeida (4,7%).

En relación con la cuantía media de cada intento de estafa, Girona (1.771 euros) y Lleida (1.339 euros) se sitúan por encima de la media estatal (1.284 euros), mientras que Barcelona (1.046 euros) y Tarragona (772 euros) registran cuantías inferiores.

En Catalunya, 1,5 millones de conductores justificaron el fraude al seguro. Además, el 68% de los conductores catalanes admite que denunciaría a otra persona por fraude al seguro si obtuviera un beneficio económico directo a cambio.

En España las provincias de Cuenca, Murcia y Jaén son los territorios con más fraudes, mientras que Soria, Salamanca y Burgos arrojan los índices más bajos.

La cuantía media de cada intento de estafa en España ronda los 1.284 euros, un 45% más que en 2013, aunque se registran variaciones importantes entre provincias. Huesca, Lugo y Almería son los territorios con cuantías medias más altas, con 4.800 euros, 3.600 euros, y 3.200 euros, respectivamente. En el lado contrario se sitúan Segovia, Zamora y Zaragoza como las provincias que menor importe medio defraudan a las compañías aseguradoras, con unos costes medios por fraude de 230 euros, 301 euros y 390 euros, respectivamente.

Tipología del fraude

Por tipo de estafa, los daños ajenos al siniestro siguen siendo la tipología más habitual en los fraudes materiales, ya que está presente en 3 de cada 4 casos. Le siguen, a más distancia, los montajes preparados con antelación en los que intervienen varias personas (12%), los fraudes por presupuestos inflados (7%), las averías declaradas como siniestros (1,5%) y los falsos hurtos (1%).

Por otra parte, las conclusiones del estudio muestran algunos síntomas de mejora, ya que la intención de los conductores de cometer el fraude se ha reducido a casi la mitad respecto a hace dos años, lo que podría ser un indicio de cierto retroceso de estas conductas al que asistiríamos en los próximos años.