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El Gobierno Central presupuesta unas partidas que después no concluye. Así lo pone de manifiesto el Departament d’Economia i Coneixement de la Generalitat, que en su página web permite comprobar la liquidación de las cuentas del Grupo Fomento (incluye el Ministerio y las empresas públicas estatales).
Según el Govern, en 2013 –el último con la información disponible– el nivel de ejecución fue del 64,8%, lo que representa que, de cada cien euros, 35,2 se volatilizaron. Esto significa que de los 336,17 millones que el Ministerio de Ana Pastor dijo que invertiría en la demarcación de Tarragona, solo llegaron 217,8, mientras que los otros 118,33 millones no se tradujeron en obra real.
El Govern muestra la evolución de este porcentaje. El dato más antiguo corresponde a 2001, cuando el grado de cumplimiento fue de un 74,5. Más o menos se ha mantenido entre un 70 y un 80%, a excepción de 2012 cuando se alcanzó el 105,8%.
Desde la Cambra de Comerç de Barcelona se estudiaron las inversiones del Grupo Fomento en el periodo de 2004 a 2014. Según demuestra, trece de cada cien euros presupuestados «se pierden» por el camino, una cantidad que en el caso de las inversiones catalanas llega a los dieciocho euros. De esta forma, Catalunya se sitúa en la decimotercera posición en el ránking de comunidades autónomas con un mayor grado de cumplimiento. Encabeza esta lista Castilla -La Mancha con un 112% de las inversiones presupuestadas ejecutadas. En el otro extremo, Murcia está en un 65%. «Es una mala praxis ya que vemos que los presupuestos se han convertido en ilusiones ópticas», lamenta el director de Estudis d’Infraestructures de la Cambra de Barcelona, Cristian Bardají.
En este estudio, el ente cameral ha analizado datos del conjunto de Catalunya ya que resulta imposible territorializar algunas de las partidas que incluye Fomento en los presupuestos.
Bardají asegura que la liquidación de los ejercicios presupuestarios se conoce, cada vez más, «con datos más detallados y exhaustivos». «La presión social ha conseguido este nivel de transparencia, aunque debería ser un toque de alerta que Fomento no haya cerrado el desglose territorializado del último año», dice. Coincide además con el año en el que este departamento invirtió menos en Catalunya, no llegando ni siquiera a los mil millones de euros.
Bardají asegura que no hay un proyecto en concreto que haya sido víctima de este «aplazamiento» en su ejecución. Pese a ello, reconoce que lo que ha pasado con el desdoblamiento de la vía en el tramo Vandellòs -Tarragona no se incluye dentro de lo habitual.
