Vox eleva hasta el Congreso su boicot a las políticas contra la violencia machista

El portavoz del grupo de Vox en Madrid y secretario general del partido, Javier Ortega Smith, es reprobado «por falta de respeto a las víctimas» gracias a Cs y con el PP en contra

28 noviembre 2019 09:00 | Actualizado a 28 noviembre 2019 13:25
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El negacionismo de la violencia machista de Vox ha escalado hasta el Congreso, donde esta formación impidió ayer la aprobación de una declaración institucional el mismo día que el Ayuntamiento de Madrid reprobó al concejal Javier Ortega Smith por sus posicionamientos frente al maltrato.

El respaldo de Ciudadanos permitió que el pleno del Ayuntamiento de Madrid reprobara al portavoz municipal del partido de extrema derecha, cuyos cuatro concejales permitieron que José Luís Martínez-Almeida se hiciera con el bastón de mando en la capital, donde ahora se negocian los presupuestos. El alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, manifestó que lo que está en juego es la «libertad de expresión», y que la reprobación de Ortega Smith sentaba un precedente peligrosísimo».

Tras la reprobación «por su falta de respeto a las víctimas de la violencia de género» en el acto conmemorativo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia sobre la Mujer el pasado lunes, Ortega Smith declaró que le «importa un bledo» y que se siente «orgulloso» de su actuación.

La ofensiva de Vox, que ha frustrado que distintos ayuntamientos y regiones hayan podido aunar declaraciones institucionales, también ha llegado al Congreso.

El partido liderado por Santiago Abascal ha sido el único que se ha negado a firmar en la Cámara Baja declaraciones institucionales en contra de este problema y a favor de la protección de los niños, lo que ha impedido la unanimidad obligatoria en estos casos, e impedido que pudieran ser aprobadas por la Diputación Permanente.

PSOE, Unidas Podemos, Bildu, ERC, PNV y Coalición Canaria decidieron leer ambas declaraciones en un acto conjunto en el que no participaron ni PP ni Cs pese a suscribir ambos documentos.

La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, acusó a Vox de «combatir el feminismo» al negar de forma «obtusa» la violencia machista para mantener «estructuras sexistas», «un despropósito» que constituye «un movimiento retrógrado e inquietante» para la democracia.

Consenso por los aires

Tampoco han podido sacar adelante sus declaraciones institucionales los Parlamentos de Andalucía, Asturias y Aragón.

El Parlament de Catalunya aprobó una moción de ERC en la que exige la derogación de la ley de Extranjería, la Reforma Laboral, la Ley Mordaza y la Ley de Vivienda como causantes de «violencia institucional», que consideran una de las «principales causas de violencia machista». Tanto la portavoz del Govern, Meritxell Budó, como la diputada de JxCat Aurora Madaula arremetieron contra Ciudadanos.

«Si donde gobiernan ustedes permiten que se relativice la violencia machista, son cómplices; si permiten que se le diga violencia intrafamiliar y no machista, también son cómplices», dijo Budó.

Mientras la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, evitó pronunciarse sobre la reprobación de Ortega Smith, por no ser un asunto de su competencia, el consejero de Justicia, Interior y Víctimas de esa comunidad, Enrique López, manifestó que son «la demagogia y la división» los enemigos de las políticas contra la violencia machista.

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