26J: El cambio no llega, el bipartidismo resiste

El bipartidismo está tocado pero está claro que no está hundido

19 mayo 2017 18:51 | Actualizado a 21 mayo 2017 16:58
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Una semana después del 26J el PP trabaja para articular un gobierno exprés a través de la investidura de Rajoy con el apoyo o la abstención del PSOE o de C’s, PNV y CC. Las negociaciones no serán fáciles pero en un contexto de inestabilidad europea los poderes económicos, financieros y mediáticos presionarán para que haya gobierno. Tanto los de Sánchez cómo lo de Rivera tendrán que construir un relato para justificar este escenario. Tal vez volverán a teatralizar un nuevo pacto para hacer ver la supuesta intransigencia de Unidos Podemos (UP) y así justificar el hecho de facilitar un gobierno del PP.

En estos comicios la abstención ha aumentado, la ley electoral ha continuado beneficiando al bipartidismo, el cual está tocado pero no hundido, y ha quedado demostrado que los tiempos de los cambios políticos no son lineales. El PP ha sido el vencedor real y simbólico y ha conseguido concentrar el voto útil de la derecha a expensas de Ciudadanos y de movilizar a su electorado con una campaña del miedo hacia UP y las confluencias. Por su parte Pedro Sánchez, con el peor resultado de la historia del PSOE, ha evitado el sorpasso y gana tiempo y fuerza para afrontar las luchas internas por la dirección de su partido.

En cuanto a UP no ha cumplido las expectativas demoscópicas, pero con 71 diputados se ha consolidado y abre un periodo de reflexión para analizar qué ha fallado y como reorientarse tácticamente para afrontar la situación política-social actual. Las únicas alegrías han sido en Cataluña y Euskadi donde las candidaturas del cambio han conseguido la victoria. Concretamente en Cataluña En Comú Podem ha vuelto a ganar las elecciones afianzando un espacio del catalanismo popular, soberanista y de izquierdas. Finalmente Ciudadanos es el gran derrotado de la jornada electoral ya que pierde apoyos, tanto en votos como en escaños, y fuerza en su intento de convertirse en recambio del régimen.

Los resultados ponen a la luz que el discurso del miedo ha funcionado, que el PP sale reforzado pese a la corrupción y la situación de aumento de las desigualdades y que la estrategia de Podemos de articularse como una «máquina de guerra electoral» centrada en la competición electoral y la comunicación política descuidando la autoorganización y la intervención en movimientos sociales y sindicales ha fracasado.

El previsible y seguramente inestable gobierno de Rajoy tendrá que gestionar la recesión económica que se aproxima y los nuevos recortes que Bruselas exige. La situación hará imprescindible articular una respuesta masiva en la calle así como repensar la estrategia político-electoral para ganar el cambio.

Comentarios
Multimedia Diari