Camiones de 25 metros

Acaba de realizarse, en las carreteras de Catalunya, una prueba piloto de un vehículo de mercancías de veinticinco metros de largo. El mismo supone una reducción de más del veinte por ciento del coste del transporte rodado convencional, además de otras ventajas importantes. Pero ya antes de empezar, la formación política Podemos se ha adelantado a la prueba, al pedir al Congreso de los Diputados que se impida la circulación de estos vehículos, en razón a que supondría una importante transferencia de tráficos del ferrocarril a la carretera.

La primera prueba de circulación por carretera se ha realizado desde las antiguas instalaciones de la factoría Yamaha, en Palau-Solità, a la planta de Seat en Martorell, separadas por unos 35 kilómetros. El vehículo consiste en una cabeza tractora y dos remolques unidos por una plataforma, siendo ésta el único elemento que supone coste, unos 35.000 euros, dado que la cabeza y los remolques pueden aprovecharse.

El peso total bruto de estos vehículos excede en 20 toneladas el máximo permitido actualmente y su longitud total supera en casi 10 metros a los actuales camiones. Para su circulación es necesario un permiso específico para cada trayecto, expedido por la Dirección General de Tráfico (DGT).

Aunque este tipo de vehículos aporta importantes ventajas desde el punto de vista económico y medio- ambiental, con respecto a los camiones actuales, su futuro en Europa, por el momento, resulta bastante incierto teniendo en cuenta que en Francia no se permite su circulación.