Carrera de ratones

Cada vez se llevan peor nuestros líderes y hay gente que lo atribuye a que son muchos y otra cree que lo que les pasa es que no son auténticos líderes. No es lo mismo ponerse a la cabeza de una manifestación que convocarla y volver la cabeza a ver si alguno nos han seguido. A eso se le llama en el argot político, que entre nosotros es un dialecto, capacidad de convocatoria. Desgraciadamente, en muchos casos está en manos de discapacitados mentales a los que les gusta es hacer ruido. ¿Por que hay tantas personas, en su mayoría respetables hasta la víspera, que están convencidas de que vinieron al mundo para organizarlo? La abundancia de vocaciones se nota mucho en los pueblos. No hay mangurrino que no se crea Disraeli, aunque jamás haya oído hablar de él, pero los que se encuentran en un estado intermedio son los que dan más lata. Ahora la mayoría de los líderes regionales le está pidiendo a Rajoy que adelante las elecciones, ya que para luego puede ser casi tarde o casi nunca. En especial para aprobar los Presupuestos de 2016.

Si se adelantan para julio podrán ser aprobados, incluso con una nota alta, antes de que finalice la legislatura. Da ahí la carrera de los ratones, que esta vez no se conforman con que se la den con queso. Ya sabemos, porque nos lo explicó nada menos que Cervantes, que en la canícula ardiente está la cólera a punto, pero lo más llamativo es que se alíen los que en principio no tienen nada en común. Lo han hecho, está vez movidos por una fuerza mayor, Podemos y PP. Desean investigar la corrupción en Andalucía y para eso se necesita mucho tiempo, muchas ganas y muchas comisiones. Van a faltar detectives. La Junta cree que husmear en la corrupción no es ni higiénico ni recomendable, ya que existe la voluntad total de aportar toda la información acumulada en época tan larga. Habrá que condecorar a los archiveros y a los que recuerdan. Se necesita tener mucha memoria para olvidarse de todo.