Desmitificar la náutica

Una de las ideas enquistadas contra la que los aficionados a las actividades náuticas venimos luchando desde hace tiempo, es la imagen falsamente elitista que se desprende de esta afición. La idea, casi solidificada, de que se trata de algo exclusivo y prácticamente inalcanzable. Es un comentario que oímos muy a menudo: ‘Esto es para gente con dinero’.

Los que tenemos una vinculación directa con el mundo del deporte y el ocio náutico, intentamos, seguramente no con el acierto que deseamos, hacer ver que la práctica de la náutica, en sus diversas modalidades, es accesible a la totalidad de los aficionados. Decimos que no es fácil cambiar la imagen, muy enquistada, ya que, como en todo en la vida, hay niveles, y la náutica parece que se ha instalado en lo más alto, en contra de todos los que amamos la mar y promulgamos que se difundan abiertamente todas sus posibilidades de ocio.

En este sentido, uno puede perfectamente navegar, por ejemplo, sin necesidad siquiera de tener en propiedad una embarcación. El sector tiene los suficientes mecanismos comerciales para dar acceso a todo el mundo mediante el alquiler de embarcaciones, no importa el tamaño que estas tengan. Si se elige esta opción, podrá comprobarse que en muchas ocasiones el chárter náutico no es más caro que el hacer uso de un automóvil de alquiler por el mismo periodo de tiempo. Insisto que hay niveles, pero no debemos quedarnos en la clásica foto fija del superyate anclado en una playa paradisiaca.

En este intento de popularización de las actividades náuticas se enmarca la Fira Marítima de la Costa Daurada, que este año celebra su edición número 8. Un esfuerzo conjunto del Ayuntamiento de Cambrils, el Club Nàutic de Cambrils y las asociaciones y empresas participantes que han decidido estar presentes en este evento único en la Costa Daurada. En esta edición (Cambrils, del 14 al 17 de mayo) se aumenta en un día la duración de la Fira y se multiplican las actividades dirigidas al público en general, destacando la 1ª Trobada d’Embarcacions Tradicionals de Catalunya.

Y un breve apunte, que merece una reflexión aparte. Nuestro litoral tiene un potencial enorme para hacer crecer el turismo náutico. Es una baza que debe explotarse en beneficio de la comunidad y en la que administración, clubes y empresas podemos recorrer un largo camino juntos.