Una profesora pregunta a un alumno de primaria: «¿Cómo mató David a Goliat?». Responde: «Con una moto». «No lo sabes, fue con una honda» –dice la maestra. Y el escolar: «Ah, yo no sabía que tenía que decir la marca».
Algo así ocurre con el pulso entre el Govern y la oposición acerca de cómo se llevará a cabo la «desconexió» de Catalunya con España. El Govern no quiere dar detalles; solo dice que va como una moto, y que será antes del verano porque el referéndum hay que hacerlo en septiembre.
Junts pel Sí y la CUP preparan en secreto los planes de escisión. Lo hacen en nombre de la astucia y con la excusa de no dar bazas al Gobierno de Rajoy, para que no pueda poner más palos a las ruedas.
Creo que la astucia, tan invocada, tiene en este caso otra ventaja para ellos: no dar detalles a la mitad de catalanes que no quieren la independencia. Que se la encuentren hecha.