Un suizo de vacaciones busca orientación sobre el camino, detiene su coche y pregunta a un matrimonio que ve en la cuneta:
- Entschuldigung, können sie Deutsch sprechen?
Sus oyentes permanecen mudos.
- Excusez-moi, parlez vous français?
Los dos continuaron mirándolo impávidos.
- Prego signori, parlate italiano?
Nada por parte de la pareja.
- Vocés falam portugués?
Ninguna respuesta.
- Please, do you speak English?
Nada.
Angustiado, el suizo desiste de seguir preguntando y se va.
Laura mira a su marido y le dice. Tal vez debiéramos aprender alguna lengua extranjera.
Responde el hombre: ¿Y pa’ qué? Este sabía cinco y ¿le sirvió pa’ algo?