Estado, mercado, comunidad... y espabilar, amigos

El catedrático de Economía Antón Costas explica que ponemos demasiado el foco en el estado y en el mercado y nos hemos olvidado del tercer pilar de la prosperidad: la comunidad, el territorio

09 junio 2021 20:25 | Actualizado a 10 junio 2021 05:38
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Los colegios estaban cerrados a cal y canto por la pandemia. Los niños llevaban cuatro meses sin cole entre descentrados e hiperactivos. Los papás dejamos de consumir antigripales; pero disparábamos el consumo de antidepresivos.

Los niños ricos lo pasaban mal; los niños pobres, mucho peor. Y sin embargo, los adultos insistían, acongojados y egoístas de dejar a los niños sin cole y tenerlos encerrados en casa cuando escolarizar es la única forma de dar oportunidades a los menos favorecidos.

Y, de repente, en medio de la histeria, el catedrático de Economía Antón Costas, que formaba parte de la población de riesgo, me dio un titular arriesgado incluso para su propia salud: «El riesgo que evita tener los colegios cerrados no compensa el daño que causa».

Y argumentaba que los niños de clases más desfavorecidas, y en especial los inmigrantes, pagaban un precio demasiado alto por no ir al colegio en relación a las cifras de la epidemia. El tiempo le ha dado la razón: menos mal que se impuso su sentido entonces poco común, pero tan generoso y comunitario.

Ahora escucho a Antón en vídeo presentar la Guía de la Excelencia Empresarial 2021 del Diari. Y vuelve a sorprenderme con dos palabras: «Empresa y Comunidad»; porque algunos aún las creen reñidas en una ridícula suma cero: cuanto más ganan las empresas, menos las personas.

Y es un error que nos sale carísimo, pero que se me intentó inculcar desde el colegio. Se me decía que los empresarios chupaban la sangre de los obreros. Y me llevó años descubrir que en algunos casos era cierto y en otros pasaba al revés. Y que en la mayoría ni una cosa ni otra sino todo lo contrario: el empresario al perseguir su beneficio en un mercado bien regulado procuraba también el de todos.

La fórmula ganadora aúna la necesidad de lo público con la iniciativa de lo privado, porque, al cabo, la ciencia y la Historia nos demuestran que los humanos hemos evolucionado para cooperar o para ser desgraciados.

Antón Costas, además, ha evolucionado hasta merecer ser propuesto para ministro por un gobierno de derechas, el de Mariano Rajoy, que no pudo aceptar por motivos personales; y para presidente del Consejo Económico y Social por el gobierno de izquierdas actual que sí aceptó: tal es el grado de transversalidad política, sentido común, bonhomía y saber hacer que ha conseguido -lo de ser gallego también ayuda- durante años de maestría académica y empresarial.

Alex Saldaña, director en funciones, y Núria Pérez, subdirectora de este diario, escoltan al presidente Costas mientras explica que ponemos demasiado el foco en el estado y en el mercado y nos hemos olvidado del tercer pilar, la comunidad, el territorio, nuestra Tarragona (que no se me enfaden los de Reus y otras prósperas comunidades vecinas).

Y ahí, tan lejos de internet y las pantallas y tan cerca de las personas es donde deberíamos estar los economistas, periodistas, políticos y quienes queremos ganarnos la vida ayudando a los demás a que se la ganen con nosotros.

Antón al final cita los viajes de Larry Summers, pero yo también me acuerdo de aquellas ediciones del Diari…¡En ruso! Eran momentos difíciles para todos, pero este medio de comunicación supo ver la oportunidad de salvar los malos tiempos en la recuperación rusa que, como los katanka para los sioux, los bisontes en tiempo de hambre, llegaban a toda la Costa Dorada con sus rublos a salvarnos cuando parecía que se hundía el euro. Y así me atrevo a proponer el cuarto pilar de la prosperidad: el mercado, el estado, la comunidad…Y espabilar, amigos.

Lluís Amiguet es autor y cocreador de ‘La Contra’ de ‘La Vanguardia’ desde que se creó en enero de 1998. Comenzó a ejercer como periodista en el ‘Diari’ y en Ser Tarragona. Su último libro es ‘Homo rebellis: Claves de la ciencia para la aventura de la vida’.

Comentarios
Multimedia Diari