Hipercor y Puigdemont

Hace unos días un alto cargo de la Generalitat, independentista pero con memoria, expresaba su admiración por la profesionalidad con la que la Guardia Civil se enfrentó a ETA hasta derrotarla. Citaba a este Cuerpo, pero sin duda incluía en su pensamiento a otras fuerzas.

Puigdemont aprovechó el 30 aniversario de la masacre de Hipercor para resaltar también este triunfo frente a los terroristas, pero obsesionado como está por el monotema, le dio por comparar la lucha que se libró contra ETA con la que libran los independentistas contra el Estado, poniéndose él como representación de la ley y la justicia y dejando al Gobierno el papel de los asesinos.

Cualquier acto lo aprovecha para atacar al Estado, sea un triunfo deportivo, una visita a una fábrica de corchos o el aniversario de Hipercor. 

No debería forzar tanto las comparaciones a riesgo de convertir las metáforas en tonterías.