La bomba de Frankfurt

La mayor bomba de la historia fue la Grand Slam, arrojada por los británicos en marzo de 1945. Medía 7,5 metros y pesaba 11 toneladas. 

La bomba hallada en Frankfurt, que obligó este fin de semana al desalojo de 70.000 personas, no era tan grande, pero pesaba 1,8 toneladas. Fue una de las miles de bombas arrojadas sobre poblaciones alemanas, entre ellas Augsburgo y Hannover, que en las pasadas Navidades necesitaron evacuar a más de 50.000 personas cada una para desactivar estos artefactos. Han pasado más de 70 años desde que se arrojaron aquellas bombas (al tiempo que los alemanes atacaban Inglaterra) y, pese a su largo letargo en el subsuelo, aún resultan muy peligrosas. En estas siete décadas no queda ni rastro de aquella enemistad entre Londres y Berlín. Fue la locura de Hitler la que encendió la mecha de una catástrofe enorme. Cabe recordar esto cuando otro loco, Kim Jong-un se muestra capaz de encender la mecha de otra guerra devastadora.