La corrupción, abierta en canal

Cuando parecía que la corrupción política en España había tocado fondo. Cuando se había extendido el convencimiento de que todos los casos descubiertos estaban ya en manos de la Justicia. Cuando parecía que ya sólo cabía esperar las sentencias correspondientes... la ‘Operación Lezo’, con la detención del expresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, y una decena larga de altos cargos vinculados al gobierno autónomo, abre nuevamente en canal -y nunca mejor dicho- el mayor problema que padece España en estos momentos, en opinión de los propios ciudadanos. Pero por si no fuera suficientemente grave el volumen del entramado corrupto en torno a las empresas gestionadas por la Comunidad de Madrid, con el gigante  Canal de Isabel II a la cabeza, otro problema, aún más grave por lo que supone de menoscabo al sistema democrático, ha venido a empozoñar las instituciones fundamentales del Estado. La apelación de un grupo de fiscales al Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal, ha puesto en evidencia los temores sobre el carácter político del nombramiento de Manuel Moix al frente de la Fiscalía Anticorrupción. El caso ha abierto una profunda crisis en tan fundamental organismo para el buen funcionamiento de la Justicia y ha desmontado los argumentos del Gobierno que  ya quedaron en evidencia en la grabación en la que podía oírse al ministro del Interior la famosa frase de «esto la Fiscalía te lo afina».