´Pot pourri´

Ya vienen los Reyes, con el aguinaldo…”.La canción navideña se sustituye este verano por la de “ya vienen los políticos, llenos de regalos…”. Todo será maravillo si votáis a X o a Z o… no hay cosa que exalte más al ser humano que la ilusión y la esperanza. Aunque parezca o sea imposible.

Ya nos están bombardeando en radios y TV, incluso públicas (que pagamos entre todos) con acentos partidistas. Es el “pot pourri” del gran espectáculo. Pero, lector, ¿verdad que no es oro todo lo que reluce y nos prometen?...

Vamos por partes.

Desde el gobierno de Madrid – dejemos ya de decir “desde Madrid” – los ministros nos dicen que estamos en el buen camino. Para ellos, claro. Porque el Sr. Montoro no ha dejado de subir los impuestos hasta las cotas más altas de la democracia. La desocupación afirman que sigue decreciendo. Lo que no indican son los datos de los empleos submileuristas, ni que el tiempo medio de los contratos es de 3 meses. De que así no hay hogar que resista, salvo malviviendo, caso de millones de ciudadanos, que no es el del Sr. Wert, de infausta memoria.

Lo que no dice el gobierno de Madrid es porqué se destruyeron los ordenadores del Sr. Bárcenas, ni porqué su partido está trufado de imputados, ni porqué no se dialogó sobre el pacto fiscal que hace ya tiempo hubiera sentado a la mesa a los gobiernos de Madrid y de Barcelona. Como tendrán que llegar, sí o sí.

Desde el partido que afirma representar a lo mejor de la izquierda y de los obreros (P.S.Obrero.E.) aún esperamos conocer las raíces de los ERES andaluces, o los desfalcos mineros de Asturias, o los rifirrafes en Madrid. Por no recordar los asuntos del PSC en Cataluña (Sr. Zaragoza y compañía, por ejemplo).

Los Sindicatos… Hablaremos otro día. Recordar el gobierno, no muy lejando del “tripartito” es ponerse a llorar. Con las magníficas representaciones de lo que no es gobernar, a cuenta de los Sres. Benach, Carod-Rovira, y sus caprichitos. Pregunto: ¿por qué ERC se ha puesto al lado de CDC para que el Sr. Artur Mas no sea investigado como el Sr. Pujol Soley, del que fue muchos años mano derecha económica?...

Ay, pobre CDC. Despojada de Unión Democràtica, se sigue hundiendo sin remedio en la zona de arenas movedizas a la que le ha llevado el Sr. Mas, sostenido (es un decir) por el Sr. Junqueras. ¿O es que nadie recuerda que este grupo, que promete la Cataluña triunfante, rica y plena como nunca, tiene la sede embargada?...¿Ni que está bastante liada con el asunto Palau, de Millet y Cía.?... ¿Cómo acabará el asunto Sumarroca y lo del 3%?...Pasando el tamiz por Tarragona, ¿qué ha hecho el gobierno de CDC en Barcelona por nuestra provincia?... Además, con ese intrusismo hacia los vecinos, Aragón y Valencia, digno de una antología del disparate.

Ya no me refiero a los asuntos generales catalanes, seguramente envueltos en el papel de celofán de la gloria soberanista. No tiene importancia el hambre de muchos niños, la inasistencia a personas emigrantes, los desahucios intangibles, las promesas incumplidas, ir a la cabeza de las autonomías con más recortes, en fin, el gobierno de cada día, que duerme en brazos de la dulce canción del futuro independiente.

¡Tiembla Italia, que aún hay que reclamar l´Alguer y Sicilia!...

¿Crees, lector, en conciencia, que nos pueden gobernar bien o llevarnos a esa independencia rica y plena alguno de éstos?...

Así que, si no me equivoco, en este pot pourri – en francés, olla podrida) nos quedan los partidos de izquierda-izqueirda, que aún dudan, siendo de esencia internacionalista, si apoyan o no a los separatistas, la mayoría de un burgués que espanta. ¡Qué desconcierto, Sr. Herrera!...

Por último, los emergentes: C´s y Podemos, han de demostrar cosas en Cataluña. El primero hace ya varios años que nació aquí, precisamente. Su trayectoria está limpia y se está rodeando de gente preparada. Los de Iglesias oscilan entre si se apuntan a otros conglomerados con sus siglas o van en manada. La pelota está en el aire.

Lector: pìensa en todo ello, y que el hecho de que una parte del barco se quiera amotinar, no significa que se haya de partir la nave. Ni omitir las razones de los levantiscos. Siempre hay un puente de unión, si se quiere recorrer. Y para ello has de utilizar tu voto, ahora más que nunca, pensándolo, no sintiéndolo. No lo admite la política práctica. Nos jugamos mucho en este envite.