Se veía venir y anoté: «Avanzo un temor: que quienes organizan el referéndum quieran darlo por válido sea como sea, es decir, independientemente de su participación, con tal de que los ‘sí’ sean más que los ‘no’».
La CUP protagonizó la explicación de la ley del referéndum que se prepara. Benet Salellas, Gabriela Serra y Anna Gabriel hablaron claro (su principal virtud) para decir que cualquiera que sea la participación, si los ‘sí’ son más que los ‘no’ se proclama la República.
Esto tiene para ellos una ventaja: si los no independentistas van a votar, convalidan la validez del referéndum; si no van, peor para ellos.
Los organizadores –Junts pel Sí y la CUP– ponen las reglas: una ley que prevalece sobre la Constitución, y mesas electorales por sorteo de presencia obligatoria.
Si le toca ir a una mesa y no va, se expone a un castigo. Pero consuélese: es la revolución de las sonrisas.