Totes les cartes del dia

Després del 27-S

Hem guanyat, Junts pel Sí ha guanyat, però... Per guanyar bé un referèndum ens manquen vots. Una part important d’aquests vots que ens han faltat els tenim en els catalans a l’estranger que no han pogut votar per culpa de la negligència de la infraestructura administrativa de l’Estat espanyol a l’exterior.

De tota manera, encara ens cal treballar més dur per tal d’aconseguir més suports de gent que, per altra banda, serien els més beneficiats en un Estat català independent. Hem guanyat, però cal fer autocrítica i veure per què no hem acabat de reblar el clau.

Cal, des d’avui mateix, revisar l’estratègia a seguir, especialment en poblacions i sectors socials, en què el vincle sentimental amb l’Espanya de matriu castellana és molt important. Hem de reforçar la idea que el projecte independentista és –per damunt de tot– obert, modernitzador, inclusiu i regeneracionista.

Josep M. Loste

(Portbou)

Desobediencia para todos

Dos días antes de las elecciones Artur Mas declaró que al final habían conseguido unas elecciones plebiscitarias, o sí o no a la independencia. Los resultados ya conocidos son 62 escaños para ERC/CDC. Pierden nueve diputados y desaparece Unió. Ganan las elecciones con el 47,8 % de los escaños sumando a la CUP, que no quiere a Mas de president. ERC/CDC/CUP no suman más del 50 % y además tienen unos ciento cincuenta mil votos menos que los votantes del no. Para Artur Mas esto no es suficiente. Parece que «su» democracia está basada en el trilerismo politico.

Al mismo tiempo Antonio Baños de la CUP anuncia que no votarán a Mas como president y que la soberanía catalana (CUP 8,21% Junts 39,57%) «desobedecerá toda la legalidad española». Con la misma baraja de cartas de Antonio Baños, en Vila-seca (Tarragona) el no a la independencia ha sido votado por el 66,5 % de los votantes. Por lo tanto, Vila-seca puede iniciar el proceso de independencia sobre la ilegalidad de los independentistas?

Andrés J. Moreno Cañizares

(Vila-seca)

Obras son amores y no buenas razones

Quizás a mis 94 años no entienda a la perfección a los políticos de nuevo cuño, pero lo que a mí me sorprende más es que se les escuche con tanto entusiasmo. Porque suelen ser como los de antes.

Sólo existe la diferencia de que todos son más jóvenes y mejor instruidos; pero a mi modo de ver los sistemas que ejercen se diferencian muy poco; porque el prometer y no dar, los que hemos vivido ya muchos años nos inclinamos hacia la desconfianza. Y por más que posean mayor grado de cultura y sepan pronunciar bonitos discursos, si las promesas no se cumplen, todos sabemos el resultado final.

Por lo tanto ahora, que al parecer se ve algo de adelanto en salir de la fatídica crisis que bastante siguen sufriendo creo que lo mejor y más aconsejable sería ponerse de acuerdo unos y otros para llevar España entera a un estado satisfactorio. Después, dispuestos todos de la mejor manera para dialogar con buen ánimo de llegar a buen fin en el caso de bien común en lo económico, social, político y administrativo, se puede ‘si se quiere’ dar un buen justo repaso a lo de las autonomías en general; e incluso la de Cataluña en particular.

Y si con la buena aquiescencia de todos o al menos de una mayoría consciente se crea que hacer una nueva Carta Magna es necesario para el interés común, también me parece aceptable. Lo que no me parece bien a mí es que por sinrazones fútiles, tengamos que enemistarnos. Pensemos que la paz es de un valor infinito.

Joaquín Suñé

(Salou)

Los alcaldes y los actos religiosos

La fe es una cuestión personal, con sus dimensiones privadas y públicas. La decisión de varios nuevos alcaldes de distanciar a sus ayuntamientos de los actos religiosos de las fiestas patronales está creando controversia en España, estos días lo han sufrido en Barcelona. Consideran, estos alcaldes, que la fe es algo privado que tiene que tener una expresión privada, pero ¿la fe es una cuestión únicamente privada?

Identificar personal y privado es un error muy grande: la fe es algo personal, y un acto personal tiene dimensiones privadas pero también tiene dimensiones públicas en una persona pública. Es bonito ver a los representantes del pueblo en actos culturales, religiosos y sociales que los ciudadanos valoran, organizan y celebran. La laicidad del Estado armoniza con la manera de ser de la sociedad que es plurireligiosa.

No se puede olvidar que la fe tiene también una dimensión pública, que es lo que han hecho las dictaduras al prohibir la expresión pública del hecho religioso: el ejercicio de la libertad religiosa en público, la enseñanza religiosa…

Todo da a entender que en estos alcaldes hay una incapacidad para entender lo que es una representación institucional, lo que es ser alcalde de todos. Cuando uno toma posesión como alcalde es de todos, y no sólo de los que lo han votado, tiene que tener una capacidad de representación de todos los ciudadanos; si no, hay una incapacidad partidista de ostentar un cargo público.

Suso do Madrid

(A Coruña)