Totes les cartes del dia

Elogio u ofensa

Mi respetada regidora del Ayuntamiento de Tarragona, Arga Sentís:

Después de leer su escrito laudatorio del ‘Capitán Caro’, q.e.p.d., en Línea Abierta del Diari, sinceramente me quedo con la duda, es una pena, de si realmente usted ha pretendido hacer un reconocimiento púbico del Capitán o un panfleto, perdón, denigratorio contra el Ejército Español, porqué declarándose usted, además, una «antimilitarista convencida», incluso puede inducir a sospechar que sus alabanzas al Capitán Caro son solo una excusa para ofender al Ejército.

No obstante, es una lástima que su ligereza, quiero pensar, haya empañado su buena intención, también quiero pensar, al publicar unas líneas en recuerdo al fallecido soldado. Usted sin pensarlo dos veces y con todo desparpajo, afirma:

«[...] era una gran persona, un hombre auténtico que siempre fue fiel a sí mismo, cosa que no es fácil… sobretodo dentro del ejército. Puede ser que por eso no va a pasar de capitán… Puede ser que su autenticidad le debía costar la incomprensión».

Para alabar al Capitán Caro no tenía usted necesidad alguna de ofender al Ejército. Todas las virtudes y cualidades que usted recuerda del Capitán, el Ejército, sin duda alguna, se las reconoció ascendiéndole a capitán, empleo que, entonces, pocos alcanzaban siendo procedentes de tropa y sin formación académica.

El Capitán Caro no era una excepción en el Ejército, ni sus reclutas son los únicos que recuerdan con respeto y afecto a sus jefes. Sin ir más lejos, mis tres primeros colaboradores cuando, hace cuarenta años, llegue a Tarragona para ejercer de fedatario público, fueron tres militares, los comandantes Caldu y Bodas y el teniente De Miguel, los tres excelentes y leales colaboradores, personas ejemplares, a los que aprovecho esta ocasión para rendir, una vez más, tributo de admiración, agradecimiento y cariño.

Aunque ninguna virtud o defecto es patrimonio de un grupo social o institucional alguno y todos somos un reflejo de la sociedad en la que nos ha tocado vivir, es reconocido universalmente que existen una serie de virtudes y cualidades especialmente valoradas en el Ejército, como son el honor, el valor, el compañerismo, la lealtad, el respeto, la disciplina…, llegando a ser reconocidas como virtudes militares o castrenses.

Reiterándole mi consideración y respeto.

Luis de Grandes

(Coronel del Arma de Caballería. Diplomado de Estado Mayor. Notario. Tarragona)

P.D.: Habida cuenta que usted se identifica como regidora de nuestro Ayuntamiento, yo, como ciudadano de Tarragona, deseo y espero que en el desempeño de su responsabilidad municipal, observe usted una conducta más rigurosa de la que acredita en la Línea Abierta que me he permitido comentar.

Lesions al Barça

Era previsible que el Barça patiria aquesta temporada. Si el curs passat els jugadors més importants van eludir els problemes físics, un total de catorze lesions en els dos primers mesos de campanya ha deixat molt tocat l’equip. Res a veure amb la temporada passada, quan el Barça es va consagrar gràcies, en major o menor mesura, a la seva fiabilitat física.

Respecte a l’any passat, l’inici de temporada ha estat molt més exigent. D’entrada, una gira pels Estats Units de la qual Luis Enrique ja va advertir que no era la millor manera de preparar els primers títols.

A més, els rivals de pretemporada han estat de primer nivell: Chelsea, Roma o Manchester United. A tot això, dues finals contra un Sevilla i un Athletic molt més rodats. Un total de 16 partits en 80 dies.

Per tant, el desgast físic de la gira estiuenca i un inici de temporada vertiginós expliquen els múltiples problemes musculars que ha patit una plantilla curta, degut a la impossibilitat d’inscriure els nous fitxatges per la sanció de la FIFA.

El Barça te la infermeria plena i gairebé després de cada partit té un nou client. Què es pot fer? Desesperar-se, mai. Hem de confiar en el bon joc i l’encert a porteria dels qui estan en actiu i, des de la infermeria, suplicar a la Moreneta que no es lesioni cap més jugador, que els lesionats es recuperin i que del filial en surtin nous cracs.

Iván Fernández

(Cubelles)