Un difícil equilibrio

Desde la creación del Parc Natural del Delta de l’Ebre ha mejorado substancialmente la convivencia entre la preservación del medio ambiente y el desarrollo económico en este territorio. Pero todavía se dan casos puntuales en los que este difícil equilibrio sufre algún bache. Uno ha tenido lugar este verano, y por duplicado. En las fechas de Sant Juan y hace dos semanas la zona litoral sur del Montsià sufrió una proliferación extraordinaria de mosquitos. Las lluvias de finales de julio en el Delta inundaron muchas zonas y facilitaron la eclosión de una especie muy virulenta de este insecto. En zonas litorales y de lagunas se pudieron realizar los tratamientos habituales, pero lo excepcional del caso fue que también quedó inundada una parte importante de la Punta de la Banya, una reserva natural parcial de acceso restringido. Desde allí los mosquitos volaron los escasos tres quilómetros que hay en línea recta por la bahía dels Alfacs para llegar a los dos municipios costeros.

Des de los ayuntamientos de Sant Carles de la Ràpita y Alcanar se actuó con celeridad y requirieron diversos tratamientos contra los mosquitos adultos, al organismo encargado de estos trabajos, el Consorci de Polítiques Ambientals de les Terres de l’Ebre (Copate). Pero vecinos y sector turístico exigen soluciones para que una situación como la de este año no se vuelva a repetir. Esta pasaría por poder realizar tratamientos contra las larvas de mosquito también en la Banya. Así, estamos delante de otra de estas ocasiones en que hay que buscar un equilibrio. Toca negociar para llegar a un acuerdo.