Deberíamos seguir saliendo al balcón para aplaudir al personal médico y de enfermería, y salir también para reconocer el sobresfuerzo de farmacéuticos y de profesores. Claro que salir demasiado al balcón no conviene en invierno.
Hoy me detengo en los profesores. Vaya como homenaje las palabras de uno al que admiré mucho, Luka Brajnovic: «La enseñanza no es un enfrentamiento entre un profesor que fija la altura del listón y el alumno que debe superarlo, sino un camino que recorren juntos, hasta que el discípulo encuentra su propia ruta y el profesor regresa para encontrarse con otro discípulo al que acompañar en su viaje».
El profesor es un guía que te deja libertad y a la vez te ayuda para no equivocarte. Después es él quien aplaude al alumno.