Habilidades para la vida

En estos tiempos en los que tanto se debate cómo debe ser la educación que reciben nuestros hijos en las escuelas, en los que tanto se habla de qué contenidos deben aprender y cómo han de hacerlo, me ha llamado la atención la iniciativa que ha puesto en marcha el Gobierno chino, que ha decidido que los niños deben desarrollar lo que han llamado «habilidades para la vida». Así, en el caso de los colegios de Primaria, los alumnos asistirán a clases de «almacenamiento y limpieza», al tiempo que recibirán «nociones básicas de cocina» hasta que los niños sean capaces de cocinar por sí solos. La noticia ha sido recibida en las redes sociales chinas con cierto entusiasmo, pues son muchas las voces que se alegran de que los pequeños aprendan cosas «útiles de verdad». En este sentido, un usuario recuerda que en Primaria aprendió a hacer raviolis y a coser, en tanto que otro señala que esta medida ayudará a los niños a «desarrollarse y a dejar de ser meros estudiantes que solo se preparan para pasar exámenes». Desde luego, no me parece mal esa enseñanza de «habilidades para la vida». De hecho, viendo el estado de las habitaciones de mis hijas, me dan ganas de apuntarlas a esas clases de «almacenamiento y limpieza». Quizá todavía estemos a tiempo, aunque me temo que de seguir así al final acabaremos pidiendo a la escuela que haga lo que en circunstancias normales deberían –deberíamos– hacer las familias en casa. Porque educar no es solo cosa del colegio.