La campaña peruana

Mañana se celebran en Perú elecciones regionales y municipales, y entre los candidatos hay individuos de todos los pelajes. Y entre promesas de lo más variopinto –en la propaganda de uno de ellos se ve a un personaje combatiendo a la delincuencia a golpes y disparando un arma de fuego de juguete, mientras otro propone construir playas artificiales en Lima– se ha colado también toda una lluvia de ofrecimientos al ritmo de canciones, bailes y «metidas de pata» que han hecho las delicias de los aficionados a los memes.

Hubo uno que aseguró que en una gestión suya «la corrupción está garantizada», en lo que aún no se sabe si fue un lapsus producto de los nervios y la falta de experiencia o una declaración de intenciones. Tampoco faltó quien se promocionó como «el loco del huaco erótico» –en referencia a una vasija prehispánica con un enorme falo–. Quizá saque muchos votos el candidato a la alcaldía de Wanchaq, que rompió esquemas al promocionarse regalando condones amarillos y usar una versión «alternativa» del clásico de la banda británica Queen I want to break free, titulado sin atenuantes «A Wanchaq me fui».

Más confundida dejó a la concurrencia el alcaldable que en el fervor de un mitin dijo que «cuando uno está con Dios, nadie está contigo», una frase enigmática propia de un señor que en su día aseguró que la publicación con su nombre del libro de un profesor universitario «no es plagio, es copia». Y olé. En fin, mucha suerte a los peruanos.