Sobre el chiringuito de Ricomà ‘Tarragona Cultura i Coneixement’

Para empezar, he tenido dudas de cómo titular este artículo, porque el propio gobierno de Ricomà no sabe si la fundación se sigue llamando Tarragona Smart Mediterranean City o realmente le cambiaron el nombre a Tarragona Cultura i Coneixement, pero lo vamos a dejar con el segundo nombre, que es como la conocen quienes la montaron.

Pero vayamos a las verdades de este chiringuito que se ha montado el señor Ricomà. ‘Tarragona Cultura’ recibe una subvención de 130.000€ del presupuesto municipal y gasta 73.000€ en el sueldo de una sola persona, la gerente de la fundación, ya que no tiene ninguna otra persona contratada. Es decir, que tenemos una gerente que debería gestionar y dirigir al personal de la fundación, pero ese personal no existe.

Seguro que como muchos de ustedes, yo tampoco sabía cuáles eran las funciones exactas de esta fundación, así que me decidí a investigar. Pero resulta que en la web del ayuntamiento esta Fundación no está, por mucho que busques, no la encuentras. Así que he tenido que pedir las memorias de actividad de la fundación, que deberían estar hechas de forma anual, y en las que he recibido, apenas hay dos páginas genéricas del año 2021, en las que se habla de los trabajos hechos en el proyecto ejecutivo del Banco de España. Un fracaso, otro más, de Ricomà, que dejó perder 2 millones de euros de fondos FEDER. También se habla de la Tabacalera, donde pusieron impedimentos para acoger el foro de la justicia de la Generalitat, y que sigue sin uso conocido, o del Metropol, no sé sí para hablar de los okupas de los pisos superiores.

Es decir, dos páginas (el resto es la auditoria financiera) que justifican un sueldo de 73.000€ anuales, y que el propio interventor ya ha dicho que no tienen sentido, y que lo que se debería hacer es suprimir la fundación por su evidente falta de actividad. Pero es que además, la propia intervención municipal pone en duda que haya personal directivo (es decir, una gerente) que no tiene personal que dirigir.

Está claro, pues, que la Fundación ‘Tarragona i Coneixement’ es un despropósito en sí mismo, y que solo sirve para ‘justificar’ un sueldo. Pero no se preocupen, porque si no hay actividad en la fundación es porque estos años ha habido Covid. Es la justificación que el Sr Fortuny dio al propio Diari de Tarragona. Es decir, que todos aquellos que mantuvieron sus empresas como pudieron, todos los funcionarios que trabajaron desde sus casas sacando adelante el trabajo para que la administración no flaqueara, no hubiera pasado nada, porque había Covid. Pero es que además, Ricomà ha decidido enfrentarse al interventor del ayuntamiento, cuestionando sus informes. Nunca jamás en la historia un funcionario municipal había recibido un trato semejante de quien gobierna.

En fin, de todo esto lo que más me sorprende son esos partidos tan aficionados a llevar temas a la fiscalía y que con esto miran para otro lado. Los chanchullos solo les interesan cuando son de otros, cuando son de los suyos mejor miramos para otro lado, no vaya a ser que alguna cosa acabe salpicando.