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El mecánico de Reus Jordi Perelló ha sido denunciado por presunta incitación al odio para negarse a reparar el vehículo particular de una agente de la policía española.
Según ha explicado el acusado, la agente destinada a la comisaría de Reus llamó el miércoles para pedirle que le arreglara su coche, pero él se negó “por principios” a raíz de los hechos del domingo 1-O.
Poco después, la pareja del agente, que es mosso d'esquadra en la comisaría de Tarragona, lo habría amenazado por teléfono y en persona, según ha relatado el mecánico.
Finalmente, dos patrullas de la Policía Autonómica se personaron en el taller. Posteriormente, desde la comisaría de Reus citó al mecánico porque compareciera este jueves acusado de un presunto delito de incitación al odio.
El mecánico acudió asistido por un abogado y se acogió a su derecho de no declarar. Ahora está pendiente que se lo pueda citar en sede judicial.
Perelló ha explicado que la agente se identificó como miembro de la policía española, pero que él le dijo que “no le arreglaría el coche porque a partir del día 1 de octubre decidí que no atendería agentes de la policía y de la Guardia Civil, que posiblemente ella era buena persona, pero que el silencio que habían tenido los hacía cómplices y en mi casa no eran bienvenidos”, ha relatado.
Poco después, según ha dicho, lo llamó un hombre diciéndole “que era un mierda” y que le “rompería la cara”. Al rato, ha añadido, se presentó el marido de la agente en el taller y lo acusó de ser un “racista”.
Perelló ha argumentado que tiene un taller “no marquista” y que tiene “todo el derecho a elegir el trabajo”, y ha considerado que está amparado por el Real Decreto que regula la actividad industrial y de prestación de servicios en los talleres de reparación de vehículos automóviles, de sus equipos y componentes.
“A mí no me puede obligar nadie a hacer un trabajo que no quiero hacer. No promociono ningún odio, sólo he tomado una decisión personal”, ha insistido.
El mecánico se ha mostrado confiado que el caso no vaya además y que el juez “tenga un mínimo de sentido común y entienda que, dentro de nuestra libertad, tenemos que poder elegir con quien tenemos una relación laboral y con quien no”.
Perelló ha asegurado que, desde que se ha hecho público su caso, ha recibido mensajes de apoyo “de todas partes”. “Pasan con el coche tocando el claxon y animándome, y mucha gente pregunta donde está mi taller para traer el vehículo”, ha ilustrado.
Según ha explicado su abogado, David Piqué, todavía no han tenido acceso al atestado y desconoce quién ha interpuesto la denuncia. Fuentes de los Mossos d'Esquadra han confirmado que se ha remitido el atestado al juzgado de guardia.
A la espera de poder tener acceso a la denuncia, Piqué ha considerado que estos hechos no se adaptan al tipo penal de incitación al odio. El abogado ha subrayado que, en este supuesto penal, “la voluntad de legislador era proteger minorías que pueden estar excluidas y discriminadas socialmente por motivos de raza, religión y sexo, entre otros”.
