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El pleno del Ayuntamiento de Reus ha aprobado este lunes el convenio que iniciará el proceso de venta del Hospital Sant Joan a la Generalitat. Una decisión que, al mismo tiempo, también ha adoptado el Consell de Govern. En una sesión más distendida de lo que se podía prever, el equipo de gobierno ha validado la operación con los votos a favor de Ciudadanos. La CUP se ha abstenido y el PSC ha votado en contra. Los socialistas han sido los más críticos tanto con el proceso que se ha llevado a cabo como con el resultado final.
“Es falso que el traspaso del Hospital a la Generalitat lo vaya a beneficiar económicamente o que mejore su calidad asistencial, porque ya se hacía un gran trabajo”, ha manifestado la concejal del PSC, Sandra Guaita, quien ha lamentado que “del Pacte de la Salut se ha pasado a su venta” y ha denunciado no haber podido consultar la auditoría previa al acuerdo. Tras finalizar la sesión, la propia Guaita ha acusado al alcalde Carles Pellicer de “regalar el patrimonio de nuestra ciudad”. Por su parte, el concejal de Salut, Òscar Subirats, y tras su intervención introductoria, ha respondido las críticas del PSC dejando claro que Reus no se puede hacer cargo de un hospital y que “la capitalidad sanitaria se mide por la calidad del servicio que se presta”.
Las claves del convenio
Lejos de cerrar la venta, el convenio validado este viernes fija los pasos que se deberán cumplir los próximos meses hasta culminar con el traspaso de la SAM Hospital Sant Joan a la Generalitat. Hasta llegar a ese punto deberán cerrarse distintas fases durante los seis próximos meses. Éste es el plazo máximo que fija el acuerdo alcanzado entre ambas partes. Repasando las cláusulas del convenio, una de las más relevantes es la número 6 por su carácter suspensivo.
Y es que, si “la Generalitat no llega a un acuerdo satisfactorio con las entidades financieras que concedieron los préstamos para la construcción del Hospital […] el mismo quedará extinguido y sin efectos”. El plazo de las negociaciones es de tres meses, prorrogable a seis tras mutuo acuerdo. Esto no invalida que el CatSalut y el ayuntamiento empiecen a trabajar en la materialización del convenio suscrito este viernes.
Otra cláusula interesante, y a la que se ha referido la líder de Cs, Débora García, es la que especifica que el consistorio deberá hacerse cargo “de las responsabilidades de pago de las cantidades que puedan derivar de las resoluciones judiciales” vinculadas con la macrocausa Innova. También destacar que el convenio fija la fecha del 20 de noviembre del año que viene como la fecha límite para que abandone las dependencias del Sant Joan.
Hospital Comarcal de Mora d’Ebre
La Generalitat, a través del CatSalut, comprará también todas las empresas y fundaciones el grupo sanitario reusense. Entre ellas está la Gestió Comarcal Hospitalària S.A. (Gecohsa), encargada de gestionar el Hospital de Móra d’Ebre. De hecho, el convenio también estipula la creación de otra entidad de derecho público (Salut Terres de l’Ebre) que se encargará del centro hospitalario de las Terres de l’Ebre. Ésta seguirá los mismos plazos que en el caso de la entidad Salut Sant Joan de Reus-Baix Camp.
En lo que se refiere a los trabajadores de todo el ámbito sanitario de Reus, tanto la Generalitat como el consistorio aseguran que se subrogarán toda la plantilla. De hecho, el convenio fija que es la “voluntad” de ambas partes, si bien no especifica más allá.
En total, se trata de una plantilla de 1.459 empleados del Hospital Sant Joan, 288 de Ginsa, 292 de las fundaciones y 94 del Laboratori de referencia del Camp de Tarragona y Terres de l’Ebre.
