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El pasado 2 de diciembre ardían de madrugada cinco contenedores y tres vehículos en la calle Roger de Belfort. Sin duda, este episodio es el más espectacular que ha tenido lugar en la vía pública en los últimos meses. El caso, además, volvió a poner sobre la mesa la problemática de la quema de contenedores. Según datos facilitados por los Bombers de la Generalitat, entre los meses de diciembre y enero se han quemado en Reus una veintena de containers. En ninguno de los casos se han tenido que lamentar daños personales.
El barrio más afectado por la de quema de contenedores desde diciembre del año pasado ha sido el de Horts de Simó. No obstante, sus vecinos restan importancia a lo ocurrido y señalan que han sido casos puntuales. Además, los incendios se han producido en distintas zonas de la ciudad y sin concentrarse en un barrio en concreto. Desde los Mossos d’Esquadra aseguran que son afectaciones esporádicas y, en algunos casos, fortuitas y provocadas a raíz de la utilización de estufas o braseros. Y es que si se depositan cenizas en un contenedor de manera negligente pueden llegar a provocar un incendio.
No obstante, las mismas fuentes consultadas manifiestan que en otros casos sí que las acciones podrían haber sido premeditadas. Por este motivo los Mossos tienen en marcha una investigación para esclarecer la problemática y dar con el posible responsable o responsables del incendio de los contenedores. En las tareas de vigilancia preventiva en la vía pública, los Mossos y la Guàrdia Urbana colaboran estrechamente, si bien reconocen la dificultad de atrapar a los presuntos autores porque, para dar con ellos, es necesario dar con ellos in fraganti.
En el momento actual, los Mossos d’Esquadra descartan que exista relación entre estos casos y la oleada de actos vandálicos que sucedieron hace unos tres años en distintas partes de la ciudad.
Por otra parte, no puede pasar por alto que la ordenanza de civismo vigente en la actualidad contempla medidas contundentes contra los responsables de este tipo de actos incívicos. Aproximadamente, y según el propio Ayuntamiento, el coste para reponer un contenedor giraría alrededor de los 1.500 euros, lo que supondría un coste total de, aproximadamente, unos 30.000 euros si nos ceñimos a los últimos dos meses.
El resto de actuaciones realizadas por los bomberos en estos últimos meses se centran en intervenciones en incendios en el interior de viviendas (17) y en vehículos estacionados en el aire libre (4) .
