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Un hombre que realizó tocamientos a sus dos nietas, menores de edad, ha sido condenado a un año, cinco meses y 29 días de prisión por un delito de abuso sexual. Durante cinco años no podrá ejercer oficio o profesión que conlleve contacto regular y director con menores de edad. Y durante el mismo periodo estará en libertad vigilada. Se introdujeron las atenuantes de reparación del daño y dilaciones indebidas.
El acuerdo también incluye que se deja en suspenso la pena de prisión a cambio de que no vuelva a delinquir en los próximos cuatro años, a que participe en un programa formativo sexual.
El acusado y su pareja sentimental vivían en una finca situada en una localidad del Baix Camp. Además de la vivienda había una piscina a la que acudían los fines de semana, periodos estivales o de Semana Santa las dos nietas de la mujer, ambas menores.
En fecha no determinada pero entre 2011 y la Semana Santa de 2013. Uno de los abusos se produjo durante los periodos en que las menores visitaban a su abuela y a su pareja. En una ocasión, cuando una de las niñas estaba en el piscina, el hombre empezó a contarle el sueño que había tenido a la vez que le tocaba sus partes íntimas por encima de la ropa.
En otra ocasión, y durante el mismo periodo, cuando la hermana de la anterior estaba sola con el acusado cogiendo ciruelas, el hombre le pidió que le diera masajes entre las piernas, para a continuación empezar a tocarle sus partes íntimas.
El acusado consignó en la cuenta del Juzgado 8.000 euros con la finalidad de que sean destinados al pago de las responsabilidades civiles.
