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La cuestión de confianza presentada por el alcalde de Reus, Carles Pellicer, ha terminado sin sorpresas. Como era de esperar, la medida no ha prosperado por el bloqueo político de la oposición, que por segunda vez ha votado en contra de la aprobación de los presupuestos. Lo que ya no estaba previsto es el escenario que se abrirá ahora en el plazo de los próximos 30 días, que prevén muy ajetreados en la plaza Mercadal.
En un giro inesperado, los socialistas se han postulado en el pleno de hoy para que Reus tenga “un gobierno más de izquierdas” y mejor para los reusenses. “La ciudad necesita un gobierno más plural. Y si nuestro grupo socialista tiene que incorporarse al nuevo gobierno estamos dispuestos a contemplar esta posibilidad. Un gobierno que tiene que interpretar los retos que se le plantean a la ciudad con el máximo apoyo posible”. Con estas palabras, el portavoz del PSC, Andreu Martín, se ha abierto a negociar con todos los partidos cualquier posibilidad. Entre todas las posibilidades, Martín no ha escondido tampoco la opción de crear una mayoría absoluta con el gobierno de Pellicer.
El propio alcalde, en una intervención posterior, ha recogido el guante lanzado por los socialistas para asegurar que “si tienen interés y creen que tienen lugar en el actual gobierno empezamos a trabajar después de Semana Santa. No sé si será un gobierno más de izquierdas o de derechas, pero sé que será un gobierno para la ciudad”. En la misma línea también se ha expresado el portavoz de Cs, Juan Carlos Sánchez, que también se abren a “explorar la posibilidad de encontrar un nuevo alcalde por y para todos los reusenses”. Y todo ello sin olvidar que la CUP mantiene intacta su voluntad de presentar una moción de censura para derrocar el alcalde Pellicer.
En estos momentos, la posibilidad de que una supuesta moción de censura prospere es muy complicado. Se tendrían que poner de acuerdo formaciones tan alejadas ideológicamente como Ciudadanos y los cupaires. Asimismo lo ha apuntado el propio Pellicer en el pleno municipal, que se ha mostrado convencido de que Reus tendrá presupuestos en los próximos 30 días. No obstante, su discurso inicial ha sido contundente y ha lanzado distintos mensajes a la falta de cintura de la oposición.
