El acceso a Bellissens, el único tramo de la autovía T-11 que sigue a oscuras

La autovía T-11, a su paso por Reus, sigue con problemas de iluminación, lo que ha sido denunciado en numerosas ocasiones por conductores e, incluso hace un par de años, por la Cambra de Comerç de Reus por la peligrosidad que puede suponer la falta de luz en puntos de intersección en una carretera muy concurrida. Aunque en los últimos meses se han ido solucionando gran parte de las deficiencias (la mayoría de ellas causadas por el robo de cables el cobre), queda actualmente un punto a oscuras: el ramal de la carretera T-11 que da acceso a la rotonda de Bellissens. Fuentes de la subdelegación del gobierno de Tarragona no les constan incidencias.

No obstante, en este tramo –en ambas direcciones– no hay iluminación, como ha podido comprobar el Diari, aunque sí que está iluminada la glorieta. En cambio, los puntos de luz instalados en el resto de rotondas y accesos desde la carretera T-11 funcionan en su mayoría correctamente. Y es que en algunas zonas de la rotonda que enlaza la vía con la AP-7 en La Canonja también tiene algunas farolas sin luz.

Ésta es una problemática recurrente en el tramo de esta autovía a su paso por la ciudad de Reus en los últimos dos años. En la mayoría de casos, la falta de luz se debe al robo de cableado eléctrico, dejando durante largos periodos tramos de la T-11 sin iluminar, lo que aumenta la peligrosidad para los conductores. Y es que se trata de puntos donde hay carriles de incorporación a la carretera o accesos a rotondas, por lo que la iluminación juega un papel muy importante. En este sentido, el director de la Fundació RACC, Lluís Puerto, detalla que la iluminación es un factor muy relevante en cuestión de visibilidad nocturna. «Permite anticiparse a situaciones de riesgo», recuerda. De hecho, Puerto explica que, a partir de distintos estudios «se ha comprobado que los accidentes que se producen en zonas menos iluminadas pueden ser más graves que en zonas iluminadas», aunque destalla que, en el caso concreto de la T-11, no disponen de datos concretos.

La T-11 a su paso por Reus comprende desde las cercanías del Aeropuerto y finaliza en el polígono AgroReus, pasando por Bellissens, la entrada de la avenida de Salou, Misericòrdia e Immaculada. Entidades como la Cambra de Comerç creen esencial la correcta iluminación de la carretera. En cambio, desde la Associació de Polígons de Reus se asegura que «esta problemática nunca se ha planteado».

La Cambra reclamó soluciones

En 2017, cuando gran parte de la T-11 se quedó oscuras un largo tiempo, incluso la Cambra de Comerç de Reus dijo basta y solicitó al Ministerio de Fomento que acelerase de forma «urgente» la reparación de la iluminación de la variante de Reus. De hecho, envió una carta al entonces director general de Carreteras, Jorge Urrecho, y al subdelegado del Gobierno Central de la demarcación de Tarragona, Jordi Sierra. En la misiva, el expresidente de la Cambra, Isaac Sanromà, señalaba: «Una vía de esta importancia, con la densidad de tráfico que registra y con intersecciones tan concurridas como son las carreteras de Alcolea, Salou, Bellissens, Tarragona o Montblanc no puede registrar estos déficits». A todo ello, en la carta se recordaba que «esté en juego la seguridad de miles de conductores que circulan a diario por esta carretera».

Desde entonces, poco a poco se han ido reponiendo los cables. En septiembre del año pasado, por ejemplo, la mayoría de entradas y salidas continuaban a oscuras. Únicamente las rotondas de Salou y Bellissens y sus accesos estaban iluminadas. En cambio, este pasado verano, únicamente quedaba un punto a oscuras: el acceso al Aeropuerto. Ahora, la problemática se traslada a Bellissens.