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El Ayuntamiento de Reus – junto con las entidades comerciales de la ciudad– continúa estudiando al detalle dónde ubicar la pista de hielo. Una decisión de gran relevancia ya que se convertirá, seguramente, en el principales reclamo de esta campaña de Navidad para atraer la atención de los compradores al centro de la ciudad.
Los destinos que se barajan, tal y como ya adelantó el Diari, son la plaza del Mercadal o la plaza de la Llibertat. En la elección final de uno u otro emplazamiento juegan todo tipo de factores, desde las demandas de comerciantes y paradistas a los requerimientos técnicos. Y es que la instalación de una pista de hielo requiere de un complejo montaje. No obstante, cabe recordar que la plaza del Mercadal ya acogió una infraestructura parecida en 1999, por cierto, con un gran éxito de público.
Su ubicación definitiva también estará relacionada con la intención de los responsables de la Agència de Promoció del Ayuntamiento de crear un gran circuito navideño en la ciudad con numerosos componentes que conecten el Parc Sant Jordi con la plaza Llibertat, las calles Llovera y Monterols, la plaza del Mercadal y la zona de El Pallol.
Entre los distintos elementos más allá de la pista de hielo está, en primer lugar, el tradicional Mercat de Nadal. Sobre él, sus paradistas ya alertaron que no quieren moverse del Mercadal. Aún así, en estos momentos parece que estarían abiertos a escuchar otras propuestas si éstas no les afectan en las ventas. Está previsto que la decisión final se les comunique en breve.
En caso de producirse un cambio de situación del Mercat de Nadal porque, finalmente, se decide que la pista de hielo debe ir al Mercadal, las alternativas son varias. Una de ellas podría ser su traslado a la plaza Evarist Fàbregas de El Pallol, donde los dos últimos años estaba el Mercat d’Artesania. Éste, a su vez, podría recuperar su antiguo destino cobijado dentro de una gran carpa en la Llibertat. Apuntar que dicha plaza, las dos últimas navidades, ha estado ocupada por atracciones infantiles.
Los otros elementos que se estudian estos días concienzudamente estos días tienen que ver con la decoración e iluminación de las calles, el espectáculo del mapping en la fachada del palacio consistorial o las acciones puntuales que podrían organizar las entidades comerciales de la ciudad.
El detalle y esmero con el que se está elaborando esta campaña de Navidad se entiende por la apertura de La Fira Centre Comercial. Y es que entre los comerciantes existen opiniones contrapuestas sobre sus consecuencias. Entre ellos los hay que perciben la llegada del equipamiento del Parc Sant Jordi como una oportunidad mientras que otros predicen el fin del modelo comercial de Reus. Una realidad que sólo el tiempo terminará dictando sentencia.
