El contrato de la basura se atasca

Afinales del año pasado publicaba en este mismo espacio un artículo sobre el servicio de recogida de la basura que tenemos en la ciudad. Y lo hacía coincidiendo con el décimo aniversario de la firma de un contrato que todavía sigue vigente hoy en día tras dos prórrogas. La idea era contraponer cómo se desarrolló aquel proceso con el que ahora está en marcha. Básicamente, porque una década atrás levantó una enorme polémica que a punto estuvo de finiquitar el gobierno tripartito reusense. Todo ello, muy lejos de la situación actual. De hecho, destaqué la tranquilidad con la que el gobierno municipal lo estaba llevando a cabo teniendo en cuenta que está en juego un contrato de 13,2 millones de euros.

Pues bien, la situación ha cambiado. Los hecho de estas últimas semanas relacionados con el proceso de adjudicación del contrato de recogida de la basura complican su resolución. No sé si tanto como hace 10 años, pero sí que auguran que el proceso será mucho más largo. Para empezar, los planes sobre que el nuevo convenio esté listo en verano se esfuman completamente. Y no sólo esto, sino que –tal y com apuntan algunas fuentes consultadas– el contrato podría no firmarse hasta el año que viene.

El motivo surge porque todo el proceso se ha paralizado por un recurso interpuesto contra el pliego de cláusulas inicial y que el Tribunal Català de Contractes del Sector Públic (TCCSP) ha aceptado suspender. De la resolución consultada, emitida el pasado 15 de enero, llama la atención que son dos las empresas que interpusieron el recurso especial: Fomento Valencia Medioambiente S.L. y FCC Medio Ambiente S.A. Al parecer, y según confirman fuentes municipales, en el segundo caso el motivo que le habría llevado a presentar el recurso sería el desacuerdo con la inversión pendiente de amortizar que dejó la anterior contrata, adjudicada, precisamente, a Fomento de Construcciones y Contratras (FCC).

El consistorio, sin recurso

En el propio expediente del TCCSP se apunta que, vistos los planteamientos de ambas empresas, «en caso de continuarse con el procedimiento de contratación, el riesgo de la efectividad de la resolución del recurso de referencia y los prejuicios que podrían derivarse para las empresas recurrentes serían de difícil o imposible reparación». Además, en el fallo también se señala que no cabe la posibilidad por parte del Ayuntamiento de Reus de interponer recurso.

Llegados a este punto, al consistorio sólo le resta esperar a la resolución que dictamine el tribunal de Contractes del Sector Públic y actuar en consecuencia. Como ya he apuntado, todo ello supondrá un retraso significativo que podría ser mucho más pronunciado si se tiene que repetir el proceso. O sea, redactar un nuevo pliego de cláusulas, que lo apruebe el plenario municipal y que se supere el periodo de alegaciones.

Un escenario que situaría la nueva contrata para el año que viene. No hay que olvidar que, una vez adjudicada, empezará el proceso de compra de los vehículos y adecuación de las instalaciones de AgroReus.

Situación de los trabajadores

En medio de todo este escenario, los trabajadores del servicio de recogida de la basura han empezado a alzar la voz asegurando que su situación es insostenible por falta de garantías laborales y de maquinaria.

«No podemos aguantar más en estas condiciones. Trabajamos sin seguridad y si vamos a una nueva prórroga no podemos aguantar con los actuales vehículos», declaraban la semana pasada desde el comité de empresa al Diari. Además, también advertían sobre que la ciudadanía está siendo la gran perjudicada, ya que no están prestando un buen servicio.