El niño que jugaba en el Mercadal vuelve al Fortuny

Ferran Piqué Fargas es el Amic de les Arts que hoy lleva el brazalete de capitán, el que esta noche pisará el césped de su campo, el que pasará por el túnel de vestuarios con cierto nerviosismo en la barriga y quien, seguro, hoy se llevará el aplauso más fuerte de la afición, y es que Ferran Piqué esta noche canta en casa, en su Plaça Prim donde jugaba de pequeño y en su Teatre Fortuny donde, con pocos añitos, flipó con el espectáculo de burbujas de Pep Bou.

Acompañado de sus colegas, de sus compañeros de banda y sobretodo de sus amigos, Ferran Piqué y el resto de Els Amics de les Arts presentan esta noche (21.00 horas) en Reus su último disco publicado el año pasado y que bajo el nombre de Un estrany poder regala al mundo de la música un vinilo necesario, cargado de buenas canciones y letras impresionantes, que demuestran, por si alguien lo dudaba, que Els Amics de les Arts vinieron para quedarse.

Un concierto especial para el guitarra y voz de la banda que vivió en Reus hasta los 8 años y quien pisará el Fortuny con la emoción a flor de piel. «Volver a Reus para mi es especial. Yo vivía en el barrio Antiquaris, jugaba en la Plaça Mercadal e iba al Teatre Fortuny a ver a mi tía que actuaba con La Vitxeta y está claro que quien pierde los orígenes, pierde la identidad, así que este concierto es emotivo y sé que esta noche la viviré de otra manera que el resto del grupo».

Tomando un café, el anfitrión de la noche, Ferran nos habla de los inicios del grupo, cuando esta ‘panda’ de amigos, que jamás pensó seriamente en triunfar y llenar teatros, grabó un primer disco Catalonautes con el que ganaron el premio al artista revelación del concurso Sona 9. 

Se crea un silencio en la conversación con Ferran que deja entrever lo mucho que le gusta todo lo qué ha pasado y que cuando echa una mirada hacia atrás le sorprende la cantidad de cosas bonitas que han vivido. «Es que no hay palabras para describirlo, es como cuando vas a ser padre que no sabes cómo contarlo. Es imposible imaginar una mínima parte de lo que nos ha pasado, todo fruto del trabajo y un poco de suerte y sólo puedo decir gracias, gracias y gracias», dice.

Els Amics de les Arts están en la recta final de la gira y tan solo les quedan cuatro conciertos con el de esta noche en el Teatre Fortuny. El colofón final será en el Palau de la Música de Barcelona con todas las entradas ya vendidas y con la orquesta sinfónica y el coro del Palau acompañándoles. 

«Cuando pienso en lo poquito que nos queda, me da cierta pena y a la vez mucha emoción», apunta Ferran. «Es como cuando el postre es tan bueno que lo comes despacito, pues así estamos, saboreando cada segundo como si fuera el último trocito del pastel. Por eso ahora cada concierto que nos queda lo devoramos porque no queremos que termine la gira y la verdad, se nos juntan muchas emociones».

Será el 23 de noviembre cuando se baje el telón, temporalmente, de esta banda de pop catalán que ha decidido, después de 13 años, parar, descansar y «solo quedar unos con otros para tomarnos unas cervezas y comer juntos», dice Ferran. «Lo del Palau nos emociona y la verdad, es que no estamos preparados para esa noche, pero estos son los retos bonitos que te brinda este trabajo y nos encantan porque nos hacen salir enchufados».

Los que conocemos y seguimos a Enric, Dani, Ferran y Joan Enric desde hace tiempo, intuimos que están en un momento mágico; a lo que el mismo Ferran asegura que «es mágico y muy bonito porque, a nivel de sonido y trabajo, hemos encontrado un renacimiento, una forma nueva de sonar y contar las cosas».

Entre los cuatro componentes, sobretodo reina, la amistad. La música les unió para cantarle al mundo sus historias y es a la música a quien tenemos que darle las gracias que 13 años después sigan dando guerra y pisando los escenarios. Ferran Piqué, el de Reus, habla de «la buena relación que hay en la banda y que es lo que hace que cuando subamos al escenario cada uno tenga su rol y los cuatro tengamos el mismo protagonismo. Tenemos nuestras broncas eh, y eso enriquece mucho, pero hace muchos años ya que sabemos cómo somos cada uno y no nos queda otra que entendernos».

Pero ¿cómo define Ferran a sus compañeros de aventuras? ¿Qué es lo bueno y lo malo de cada uno de ellos? a lo que nos contesta que «Dani es un músico de los pies a la cabeza; tiene la carrera de música y cuando tiene que arreglar voces y canciones sabe muchísimo y lo tiene muy claro; es sin duda, el gran instrumentista que tenemos. ¿Lo malo de Dani?, tiene la mano agujereada y si fuera por él, siempre iríamos a comer a restaurantes caros y a dormir a hoteles guays (se ríe). Eduard tiene una cosa buena que al mismo tiempo es mala, tiene una energía enloquecida, nunca sabes por dónde te saldrá y claro, a veces eso está bien pero otras da por saco. El mérito es que a veces consigue hacer cosas que no sabes ni cómo pero las hace, y eso es genial. Y Joan Enric es muy buen letrista, prácticamente todas nuestras canciones son suyas y el grupo le debe mucho, y lo malo que tiene son muchas cosas (se ríe porque lo tiene delante) es que a veces es muy borde y equivoca el momento y la manera de decir las cosas». 

Lo que está claro es que la trayectoria musical de Els Amics de les Arts es una montaña rusa llena de loopings cargados de adrenalina que les ha llevado a lo más alto y a ser una de las bandas más queridas dentro y fuera de Catalunya. Llega el final de gira, toca descansar, respirar, airearse y volver como si fuera el primer día pero con la mochila llena de experiencias vividas.