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El farmacéutico de Reus detenido por estafar 564.000€ al Servei Català de la Salut (CatSalut) operaba desde la Farmacia Morales de la calle del Vent, en el barrio del Carme. Así lo ha podido confirmar este lunes el Diari después de que los Mossos d'Esquadra comunicaran la detención del dueño de la farmacia y su hermano, de 43 y 34 años y nacionalidad española, por manipular las recetas médicas oficiales y cambiar los medicamentos prescritos por otros más caros.
La noticia no ha pasado desapercibida en el céntrico barrio del Carme, donde el caso ha estado presente esta mañana en muchas conversaciones. Algunos vecinos han asegurado que la farmacia llevaba varios meses con las estanterías medio vacías y que los trabajadores y el trato que dispensaban no eran los mismos. "Últimamente casi nunca tenían los medicamentos que querías y siempre los tenían que encargar", ha explicado un residente en el barrio, que también ha manifestado que "cuando nos hemos enterado de la noticia la verdad es que no nos hemos extrañado demasiado". Los vecinos que llevan más años viviendo en el Carme recuerdan que la farmacia lleva muchos años abierta y que había llegado a ser todo un referente.
Según la información de la operación facilitada por los Mossos, los presuntos estafadores también contaban con un local clandestino ubicado en Esplugues de Lobregat desde donde falsificaban las recetas y preparaban los medicamentos, "a fin de controlar todo el proceso de la receta". Durante los registros efectuados por los agentes se intervinieron 3.700 recetas del CatSalut, entre falsificadas o susceptibles de serlo, así como una gran cantidad de medicamentos caducados mezclados con los no caducados.
Los farmacéuticos aplauden la operación
El Col·legi Oficial de Farmacèutics de Tarragona (COFT) ha hecho público un comunicado para condenar "enérgicamente este tipo de prácticas ilegales", refiriéndose al caso relacionado con la farmacia de la calle del Vent. "Gracias a nuestro sistema de dispensación de recetas, que es totalmente seguro y trazable, se pueden detectar posibles desviaciones por parte de cualquier profesional farmacéutico". En este sentido, también señalan que "la colaboración entre la administración sanitaria y nuestra organización ha sido clave en la detención y seguimiento de este caso. Seguiremos trabajando para garantizar el mejor servicio sanitario a nuestros ciudadanos y para evitar malas praxis dentro de nuestro colectivo".
