El programa de recuperación de comida de Reus se ampliará a los restaurantes

El proyecto 'Gestió Alimentària' quiere involucrar al máximo de negocios de la restauración a partir de septiembre

19 mayo 2017 23:18 | Actualizado a 22 mayo 2017 21:32
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El proyecto ‘Gestió Alimentària’, impulsado el año 2012 por el Ayuntamiento de Reus y que desde entonces recupera los alimentos frescos que quedaban fuera del circuito comercial de los supermercados y cáterings para las familias desfavorecidas, quiere completar la tercera pata de este programa involucrando a los restaurantes de la ciudad.

Según ha podido saber el Diari, desde el programa ya se está trabajando en una idea que se ha inspirado en una similar que se lleva a cabo en la ciudad de Barcelona, donde se aprovecha la comida de algunos restaurantes de hoteles de cinco estrellas. En este sentido, la concejal de Benestar Social del Ayuntamiento de Reus, Montserrat Vilella, explica que «para poder involucrar también a los restaurantes en el programa ‘Gestió Alimentària’ necesitábamos una infraestructura mínima que ahora tenemos, como neveras más grandes».

A pesar de la intención de sumar el máximo de restaurantes posibles en este proyecto, la concejal de Benestar Social también tiene claro que «no todo lo que sobra en un restaurante se puede aprovechar para el consumo, sino que tiene que se comida que no haya sido cocinada y que esté en condiciones».

 

Pocos excedentes

Desde el sector de la restauración no ven mal esta iniciativa, aunque algunos aseguran que tampoco generan tantos excedentes para que pudiesen ser aprovechados por este programa. Gerard Gibernau, del restaurante Casa Coder de Reus , comenta que «la iniciativa está bien, pero en nuestro caso no tenemos casi excedentes. Trabajamos mucho con productos al vacío y con técnicas que nos permiten aguantar mucho tiempo los alimentos antes de cocinarlos, por lo que no nos sobra tanto».

El caso de Joan Pere Ferran, del restaurante Lizarrán, es diferente porque básicamente trabaja con pinchos que «cuando acaba el día, si no los he gastado, tengo que tirarlos porque es un peligro guardarlos mucho tiempo para su consumo». En este sentido, Ferran tiene muy claro que «cada día, todo aquel que pasa por mi negocio a última hora pidiendo comida que haya sobrado porque tiene hambre se la doy. Yo no conozco a ningún restaurador de Reus que niegue ayuda a una persona que lo necesite». Gibernau coincide con su colega y añade que «anuestro negocio nos viene casi cada día gente pidiendo lo que nos sobra y se lo damos. Es un absurdo no hacerlo porque sino es comida que va a cabar en la basura».

 

Cajas de cartón

Tanto el Lizarrán como Casa Coder han sido dos de los restaurantes más activos con la campaña que impulsó hace unos meses el consistorio reusense, que repartió cajas de cartón y bolsas entre los restauradores para que se las entregasen a aquellos clientes que quisiesen llevarse a casa la comida que les hubiese sobrado.

De hecho, y aunque la campaña duró unas semanas, estos dos negocios todavía conservan estas cajas y bolsas que reparten si algún cliente se las pide. «Normalmente, la gente se acaba lo que pide, pero también hay quien no lo hace y antes tenías que dárselo en fiambreras de plástico. En cambio, este sistema de la caja y la bolsa está bien porque se lo pueden llevar de una manera más curiosa», comenta Gibernau.

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