Un vecino de Reus se enfrenta a 21 meses de prisión por haber ofertado, a través de una web, una pata disecada de elefante, un animal en peligro de extinción. El hombre, de nacionalidad española, está acusado de un delito contra la fauna y de una infracción administrativa de contrabando. Además, el fiscal solicita que durante tres años y medio no pueda cazar ni pescar, ni tampoco tener oficio relacionado con el comercio de animales, según el escrito de acusación del Ministerio Público.
El fiscal recuerda que el animal es de un espécimen de mamífero no originario del territorio español y en peligro de extinción. La pata estaba transformada en recipiente extraíble de metal con baño plateado y medía 36x60x55 cm. Adjuntaba incluso cinco fotos de la pieza y el teléfono de contacto del vendedor.
La valoración de este espécimen se estima en 500 euros. El acusado carece de permiso o certificado de importación expedido por un órgano de gestión del Estado miembro de destino, exigible para el comercio para la legal introducción en territorio europeo del referido espécimen o bien declaración escrita emitida por la autoridad administrativa CITES (Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre).
La pieza tampoco cuenta con microchip o marca indeleble o inviolable tal como establece la normativa actual.