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El consorcio del Hospital Sant Joan de Reus ya está en marcha. El alcalde de Reus, Carles Pellicer, ha anunciado este martes en rueda de prensa que el Ayuntamiento y la Generalitat de Catalunya ya han firmado el protocolo de intenciones para la constitución del ente público, participado en un 55% por el Servei Català de la Salut (CatSalut) y un 45% por el consistorio. Aún siendo todavía un paso inicial, el documento revela las grandes bases del acuerdo, que van en la línea de todo lo que se anunció antes del verano y que pasa porque la Generalitat afronte el concierto económico y la gestión, el coste de la plantilla de trabajadores y el pago de su alquiler.
Pero vayamos por partes. Uno de los puntos más trascendentales del acuerdo es, precisamente, el compromiso contraído por el CatSalut de asumir todos los gastos relacionados con el hospital de Reus y poner fin a sus graves problemas financieros. Esto incluye el pago del alquiler, que asciende a unos siete millones de euros anuales,y que siempre se ha señalado como el principal generador de déficit del centro. Cabe recordar que el Sant Joan paga cada año un alquiler en concepto de devolución del dinero adelantado por el Ayuntamiento para su construcción. Un compromiso que se mantendrá hasta el 2025, fecha en la cual se terminarán de pagar los créditos bancarios.
Será entonces cuando el consistorio, como propietario de los terrenos del hospital, otorgará al CatSalut un derecho de superficie para 99 años con la condición que éste "ceda su uso al Sant Joan de forma gratuita y sin destinarlo a otros servicios", ha señalado la concejal de Salut, Noemí Llauradó, visiblemente satisfecha con el acuerdo. Y es que si durante todo este tiempo se genera un nuevo déficit, éste siempre lo asumiría la Generalitat de Catalunya. Otra cosa distinta es lo que ocurre con el déficit que arrastra el centro en estos momentos, ya que ambas partes todavía están negociando para saber quien lo asume. Tampoco puede pasar por alto que, aún siendo el accionista mayoritario del consorcio y asumiendo la mayor parte del control del hospital reusense, el CatSalut nunca entrará a formar parte de RSM.
El futuro de los trabajadores, asegurado
En lo referente a los trabajadores del sector sanitario de la ciudad, el acuerdo firmado contempla "subrogar todos los profesionales que en la actualidad prestan servicios en los dispositivos sanitarios que pasarán a formar parte del consorcio", ha añadido Llauradó. Esto incluye tanto los trabajadores del Hospital de Reus como el de las entidades municipales Ginsa AIE, Gestió Integral Sanitària i Assistencial y el Laboratorio de Referència Sud. Por todo ello, la concejal de Salut ha apuntado que el nuevo consorcio cumple con el compromiso realizado por el conseller Toni Comín de que la Generalitat asumiría "todo lo necesario para redirigir la situación y asegurar la estabilidad financierta del Sant Joan".
Por su parte, el alcalde Pellicer se ha mostrado convencido de que el conflicto político actual no alterará la hoja de ruta marcada y que el consorcio entrará en funcionamiento en enero de 2018. Él mismo, además, también ha adelantado que en el plazo de un año tras su entrada en funcionamiento se incorporará también la atención primaria que, en estos momentos, lleva a cabo la Fundació Sagessa-Salut. Ayuntamiento y CatSalut seguirán estos próximos meses trabajando a nivel técnico para articular la propuesta de estatutos del consorcio y la materialización de todos los aspectos contemplados en este primer documento que se firmó el pasado 25 de octubre.
