La Unió de Botiguers de Reus incrementa en un 17% su número de asociados

La pandemia ha hecho que los negocios se plantearan sumar esfuerzos. La entidad quiere expandirse en los barrios

06 diciembre 2020 06:30 | Actualizado a 08 diciembre 2020 08:35
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

La Unió de Botiguers ha incrementado el número de asociados en prácticamente un 17% desde que estalló la pandemia. En marzo del 2020 la entidad tenía 133 asociados y ahora ya cuenta con 160 asociados.

Algunos comerciantes han hecho este paso para sumar fuerzas en un momento complicado económicamente para la mayoría de negocios. Pero este aumento, también es el fruto del trabajo incansable de la entidad comercial para dar cobertura a todos los establecimientos de la ciudad, también los de los barrios más alejados del centro.

«Se trata de un proyecto de la Unió de Botiguers para hacerla crecer y que aglutine a todos los comercios de la ciudad», señala Meritxell Barberà, presidenta de Unió de Botiguers, que expone que la mayoría de los asociados son del centro de la ciudad y quieren también llegar a los barrios.

En marzo del 2020 contaban con 133 asociados y ahora son 160 en total 

  • Barberà pone de manifiesto que con la pandemia la gente ha vuelto hacía el comercio de proximidad y en parte, consideran que ha sido porque desde las «entidades comerciales hemos puesto mucho énfasis en la importancia del comercio local en las ciudades» porque da «vida a las calles», asegura la presidenta de la Unió de Botiguers. Además, añade que, algunos negocios se han dado cuenta de que «es importante que haya entidades que velen por nuestro futuro y presente».
Este pasado verano la Unió de Botiguers empezó a hacer a visitar los barrios para explicar el trabajo que hacen desde la entidad y para conocer de primera mano el tejido comercial de las diferentes zonas. Por el momento han visitado el barrio Fortuny y la calle Mare Molas.

En el barrio Fortuny consiguieron algunos asociados. Es el caso de la tienda de ropa No-No Baby ubicada en la calle Astorga. Montse Herrera abrió la tienda en 2003 pero hasta ahora no se había planteado asociarse. «En los barrio siempre ha costado un poco más y es que a veces nos sentimos un poco olvidados», señala Herrera que explica que decidieron asociarse para integrarse más en la ciudad y darse a conocer. Por el momento, valora positivamente la decisión: «Con la campaña de los Bons Reus nos ayudaron mucho y nos asesoraron».

Herrera empezó teniendo ropa infantil y para bebés, pero ahora también tienen otras prendas de moda para adultos y otros artículos de lencería. Pese a la pandemia, asegura que «por suerte» han podido ir trabajando. Pero desde el mes de marzo, ha notado cómo ha incrementado la interacción con sus clientes a través de pedidos por WhatsApp o bien con mensajes a través de las redes sociales, que asegura que le han ayudado mucho a «hacer difusión, la web la tengo pendiente».

La correduría de seguros de Jordi Huguet, ubicada en la calle Mare Molas de Reus también se ha asociado este 2020 a la Unió de Botiguers. Según Huguet, estar en la entidad comercial «es una forma de que las acciones que se lleven a cabo globalmente para toda la ciudad, ayuden a recuperar la fuerza comercial que había tenido años atrás la calle Mare Molas» y considera que será una manera de que los comercios de los barrios se sientan más «integrados a la ciudad».

A parte de su actividad profesional, Huguet también forma parte de la Associació de Veïns del Barri Mare Molas. Precisamente uno de los retos que tienen encima de la mesa es dinamizar comercialmente el barrio de la mano de la Unió de Botiguers. Antiguamente, la calle Mare Molas era la vía de entrada y salida a la ciudad para los que venían de los pueblos, y eran muchos los que paraban un momento para realizar sus compras. «La calle Mare Molas había llegado a ser el segundo núcleo comercial de la ciudad», recuerda Huguet.

Cuando el Ayuntamiento hizo una serie de cambios urbanísticos como la separación de los carriles de la avenida Països Catalans por una medianera enjardinada, y la calle Mare Molas pasó a ser de sentido único, en la zona perdieron parte de la actividad comercial que había.

Desde la asociación de vecinos, creen que una buena solución para recuperar el dinamismo comercial sería construir una rotonda en la avenida Països Catalans y que la calle Mare Molas, volviera a ser de doble sentido. Una propuesta que ya han hecho al Ayuntamiento en distintas ocasiones.

Hace más de 20 años la Unió de Botiguers había tenido más de 160 asociados y ahora el objetivo es que todos los «comercios se sientan representados por la Unió de Botiguers», insiste Barberà que recuerda que «juntos somos más fuertes, somos su voz ante las administraciones y con las campañas que hacemos pueden ayudarles a atraer clientes», concluye.

Tras la campaña de Navidad, la entidad comercial tiene previsto seguir dándose a conocer barrio por barrio. Los próximos serán el Niloga, el Gaudí o el Carrilet.

Las asociaciones de vecinos han hecho de intermediarias entre la entidad y los comercios 

La Unió de Botiguers ha trabajado conjuntamente con la Federació d’Associacions de Veïns de Reus (FAVR) para realizar las visitas en los diferentes barrios. El presidente de la FAVR, Marcos Massó, explica que se reunieron con la UB para ponerse en contacto con los principales líderes vecinales de cada zona y para conocer de primera mano su actividad comercial. «Nosotros hicimos un poco de intermediarios», señala Massó, que ve muy positivamente esta iniciativa para no dejar morir los comercios en los barrios.

Unir las diferentes asociaciones

Cabe recordar que en junio ERC dio a conocer la voluntad del actual equipo de gobierno de unir todas las entidades comerciales de la ciudad (Unió de Botiguers, Tomb de Reus, Comerciants del Pallol...) en una federación de asociaciones para hacer frente a la crisis de forma conjunta.

Comentarios
Multimedia Diari