La auditoría encargada por el Servei Català de la Salut (CatSalut) para conocer el estado de las finanzas del Hospital Sant Joan de Reus no empezará durante este mes de abril porque el concurso público ha quedado desierto. Así se comunicó a los miembros del consejo de administración del Sant Joan al respecto de un proceso que la Generalitat de Catalunya considera elemental antes de constituir la entidad pública que debe gestionar el centro hospitalario.
Concretamente, el concurso público planteaba la realización de una auditoría preventiva (Due Diligence) tanto de la sociedad municipal Hospital Sant Joan como del resto de entidades del ámbito de la sanidad (Gecohsa, CMQ, FSALUT...) e, incluso, del edificio de la avenida Bellissens que acoge el equipamiento. El periodo para presentar las propuestas terminó el pasado 22 de marzo y contaba con un presupuesto de licitación de 100.390€ (IVA incluido).
La finalización del concurso público sin adjudicatario, que se dio a conocer en el pasado consejo de administración, supone un primer revés dentro del ya apretado calendario planteado para que el nuevo ente público a cargo del CatSalut esté operativo en diciembre de 2019. Sobre todo, porque deberá convocarse un nuevo concurso público que no estará disponible, previsiblemente, hasta dentro de unos meses.
Llauradó destacó que el CatSalut asumirá el déficit aunque la entidad no se constituya este añoTambién planea algunas dudas al respecto de que el mes de julio esté terminada la primera fase prevista: Due Diligence y «emisión de un informe tras el análisis de la situación financiera, fiscal, jurídico laboral, mercantil y laboral con la finalidad de integrar la nueva entidad» pública que se hará cargo de todas las empresas del sector de la salud. Destacar que fuentes del propio CatSalut consultadas aseguraban que la necesidad de convocar un nuevo concurso no modificará la actual hoja de ruta, rechazaban que se produzcan retrasos en la entrada en vigor de la nueva entidad pública y que el plan de reuniones previsto no se detiene.
Por otra parte, la concejal de Salut, Noemí Llauradó, anunció este lunes, tras finalizar el pleno municipal que el Ayuntamiento, ya dispone de la carta firmada por parte del CatSalut comprometiéndose a pagar las pérdidas acumuladas por el Sant Joan. De hecho, estaba previsto que se constituyera la junta general del Hospital de Reus para aprobar tanto la misiva recibida por parte de la Generalitat como las medidas necesarias que deberán afrontarse para evitar su causa de disolución, que pasarían por unos tres millones euros. En este sentido, Llauradó puso en valor el compromiso del CatSalut y que éste se extienda más allá de este año si, finalmente, la entrada en vigor del nuevo ente público se retrasara.
La junta general prevista para ayer se aplazó y todavía no tiene fecha de celebraciónLa concejal de Salut también explicó que la junta general prevista se había pospuesto porque la documentación de la Generalitat llegó horas antes del pleno y que algunos grupos municipales solicitaron más tiempo para poder estudiarla. Sin fecha prevista para su aprobación, la votación se celebrará antes de finalizar el mandato.
Reserva de 62,7 millones
También cabe destacar que el Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC) publicaba una disposición a principios de año, y a través del Departament de Presidència, decretando la creación de una empresa pública que podría asumir la deuda del Ayuntamiento hasta los 62,7 millones de euros.
Concretamente, el Decreto Ley 1/2019, exponía que: «La entidad de derecho público que asuma la prestación de los servicios públicos de salud en la ciudad de Reus y su área de influencia, que puede aumentar su deuda por importe que se derive de la asunción de los pasivos financieros derivados de la construcción del Hospital Universitari Sant Joan de Reus hasta un máximo de 62,7 millones».