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La campaña de Navidad de Reus, realizada del 23 de noviembre al 5 de enero de 2020, cierra dejando buenas sensaciones al Ayuntamiento y a las agrupaciones comerciales de la ciudad implicadas. Así lo hicieron saber ayer en una rueda de prensa de balance. Y es que han pasado más de un 1.300.000 de visitantes por el centro de la ciudad.
Aunque la cifra no se puede comparar con la del año pasado, puesto que la actual se ha prolongado menos días que la anterior, establecieron desde el consistorio que «son cifras que repercuten en la ciudad, que han crecido un 1,4%, y que convierten a la capital del Baix Camp en un referente comercial del territorio». La estación enológica fue destacada como nuevo emplazamiento que «ha hecho más rica la oferta» y se aplaudió también la disposición de la iluminación navideña.
La edil de Promoció de Ciutat en el Ayuntamiento de Reus, Montserrat Caelles, manifestó su satisfacción e hizo una valoración «positiva». «La cifra de visitantes es alta y se convierte en un dato contabilizado a través de diferentes indicadores activados para esta campaña, y que han tenido como objetivo ofrecer una experiencia completa», destacó.
Una de las fuentes de datos más fiable, según destacó, es la red de aparcamientos municipales de la que han registrado un total de 263.364 vehículos, es decir, 5.853 por día (del 23 de noviembre al 6 de enero). En este sentido, puntualizó que, respecto a la Navidad pasada, ha aumentado un 5,7%. El «modelo de promoción integral» puesto en marcha ha sido «la garantía del éxito de la campaña navideña», constató.
Múltiples actividades
«Unificar tradición, comercio, cultura, turismo y restauración nos ha ayudado a consolidar esta campaña en el calendario. Nos anima a mejorarla de cara al año que viene», completó. La concejalía, de hecho, tiene previsto realizar una reunión en la que valorarán cada uno de los logros «para trabajar en estrategias de futuro».
El objetivo de esta campaña ha sido captar más visitantes y Caelles destacó especialmente el gran potencial de los espectáculos itinerantes, con el circo como hilo conductor, entre otras disciplinas. «Las calles del centro han tenido diferentes focos de actividad repartidos y cada plaza ha tenido una identidad propia», acotó Caelles. Es un ejemplo la pista de hielo de la plaza de la Llibertat, que este año ha acogido 13.802 personas.
Por otro lado, el número de visitantes, contabilizado a través de la información de ReusWifi, ha dejado un total de más de 81.000 personas. El Gremi Firaire, con sus atracciones en la feria de la plaza de la Llibertat, ha acogido a 42.000 niños y niñas aproximadamente. En cuanto a los equipamientos de la capital del Baix Camp, el Gaudí Centre ha acogido 2.118 personas, dónde el público catalán sigue siendo mayoritario (63%); el Pavelló dels Distingits de l’Institut Pere Mata, 1.122 visitantes; el Campanar de Sant Pere, 232; y, otros espacios, como la Estació Enològica, 160.
El balance realizado por las agrupaciones comerciales participantes en la campaña de Navidad fue también positivo, a la vez que realista. Los comercios han querido atraer clientes, aunque también han potenciado la creación de sorteos para llamar su atención, entre otros proyectos. «Lo más importante de los concursos que hemos puesto en marcha durante esta pasada Navidad es que todos los premios acaben reinvertidos en la propia ciudad, especialmente en el comercio local», dijo Joan Anton Muntanya, de El Tomb de Reus.
Desde Unió de Botiguers, su vicepresidenta, Meritxell Barberà, se mostró satisfecha con la campaña, «y más con la creciente competencia que tenemos hoy en día con el gigante de Internet y la realidad comercial que nos envuelve. Podemos decir, que los números de ventas son estables respecto a los del año pasado».
«Por lo que se refiere a las rebajas, creemos que es un concepto en desuso y que están totalmente desestacionalizadas. Cada comercio realiza sus propias ofertas y promociones», añadió Barberà. Pau Salvadó, presidente de El Passeig Comercial de El Pallol, distinguió que la «afluencia de visitantes se ha notado. Es evidente que el comercio está cambiando y, por eso, hay que potenciar la implicación de empresas públicas y privadas. Eso ha sido esencial para dinamizar gran parte de las calles de la ciudad».
Ildefonso Vidal, representante de Mercats de Reus, resumió que la clave de estas campañas es el poso que dejan. «Hay que focalizarse en el trabajo que hay entre campaña y campaña, puesto que es entonces cuando trabajas con ritmos reales, sin fechas señaladas. De esta Navidad, hacemos un buen balance. Estamos agotados, pero felices. Trabajamos con producto fresco y es una tarea que requiere esfuerzo. Ya pensamos en la campaña del año que viene, la cuestión es no deternerse y seguir así», concluyó, por su parte, Vidal.
