La construcción del segundo horno crematorio aún no tiene fecha

Reus quiere adaptarse a la creciente demanda de incineraciones. La ciudad ya está trabajando en la construcción de un segundo horno crematorio, lo que permitiría superar las actuales 750 cremaciones anuales y alcanzar las 800, con seis incineraciones diarias. No obstante, habrá que esperar. Y es que, aunque la previsión inicial era proceder a instalar el horno durante el primer semestre de 2019, actualmente aún se está trabajando en la redacción de la documentación previa a la licitación, según explican fuentes municipales. El proyecto, aunque más lento de lo deseado, avanza y representará un importante salto ante una tendencia cada vez más extendida, en detrimento de las inhumaciones (entierros).

En la demarcación de Tarragona, por ejemplo, las incineraciones ya representan el 42,5% de las defunciones que se gestionan, según se apunta desde la Associació d’empreses de Serveis Funeraris de Catalunya (Asfuncat), y la previsión es que la tendencia siga al alza. En los últimos diez años, las cremaciones han aumentado en Catalunya un 77%, y «el sector prevé que en 2025 se incineren seis de cada diez difuntos».

Actualmente, Reus tiene en funcionamiento un horno crematorio con capacidad de hasta tres servicios diarios. Cabe destacar que este equipamiento da servicio a Reus y Baix Camp, una zona donde, en 2017, se produjeron 1.591 defunciones. Pero el área  de influencia es, en realidad, aún mayor. Y es que en las comarcas de interior del Camp de Tarragona no hay crematorios: ni en el Alt Camp ni en la Conca de Barberà. En estos casos, los familiares pueden escoger el equipamiento que más les convenga: ya sea en Tarragona o Reus, «aunque la mayoría de casos se destinan a Reus», explican fuentes de Montblanc, que añaden que en alguna ocasión los familiares prefieren Tarragona, pero que los casos son más puntuales. Por lo tanto, las instalaciones de Serveis Funeraris Reus i Baix Camp tienen que absorben un número mayor de incineraciones que las que únicamente se limitarían a la comarca del Baix Camp.

En cambio, el Priorat tiene el servicio del reciente horno crematorio puesto en marcha a principios de marzo en Móra d’Ebre, por parte de la funeraria Priorat-Ribera-Terra Alta. Es la primera instalación de este tipo que hay en el norte de les Terres de l’Ebre. «Hasta hace unos meses, los servicios se hacían en Tortosa», explican desde la funeraria.
Proyecto de remodelación

La instalación del segundo horno de Serveis Funeraris Reus i Baix Camp se enmarca en el proyecto de remodelación del Crematori Municipal. El objetivo es dar un mejor servicio a los familiares. En esta línea, ya se ha ejecutado una reordenación de espacios y se ha mejorado la decoración. Paralelamente, otra mejora prevista es la colocación de filtros de partículas para disminuir las emisiones en el medioambiente, con el objetivo de avanzarse a la nueva normativa europea que tiene que entrar en vigor en los próximos años
En cuanto al segundo horno, el proyecto de construcción e instalación tiene un coste de 150.000 euros y la instalación está presupuestada con 175.000 euros. Por otro lado, también cabe destacar que Mémora está trabajando con la intención de habilitar un crematorio. Sería el tercero de Reus.