La pancarta Llibertat presos polítics y el lazo amarillo cuelgan de nuevo de la fachada del Ayuntamiento de Reus unos dos meses después de su retirada. Fue a resultas de una notificación de la Junta Electoral de la zona de Reus dirigida al alcalde Carles Pellicer y ordenándole la retirada tanto de la pancarta como del lazo por ser consideradas un «símbolo identificativo por al menos dos formaciones políticas» a las puertas de la celebración de unas elecciones.
Una resolución que se produjo a petición del Partido Popular, Ciudadanos y la Asociación Aixecat-Levantate, por considerar que la presencia de la pancarta y el lazo amarillo suponía una infracción electoral. Además, en la resolución de la Junta Electoral también se instaba a Pellicer a «velar por el cumplimiento del principio de neutralidad de los funcionarios públicos».
Recurso ante la Junta
Por aquel entonces, fuentes municipales consultadas aseguraron que se presentaría un recurso ante la propia Junta tras su notificación y que, una vez pasadas las elecciones generales y las municipales, se volvería a colgar tanto la pancarta como el lazo amarillo.