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El despliegue de los primeros tramos previstos comienza a poner en juego la inversión de un millón de euros que, hasta 2023, Ayuntamiento y Diputación destinarán a recoser la troceada red de carriles bici reusense con 30 kilómetros más. Recientemente, la Junta de Govern Local aprobó modificaciones en el convenio subscrito con la Generalitat sobre la reclamada vía para peatones y bicis de Blancafort, que parece estar cerca, por fin, de salir adelante. Además, el consistorio ha cerrado este año varios contratos para perfilar al menos otros dos paquetes de mejoras en el entramado, que afectan a las Oques y a algunas avenidas. La concejala de Urbanisme, Marina Berasategui, explica que «estamos avanzando en la elaboración de proyectos» e indica que «por otro lado, con el financiamiento europeo de los Next Generation, también trabajamos para dar un impulso a la movilidad».
La puesta en marcha del sistema de bicicleta compartida pública inspirado en el modelo de Girona, el de la Girocleta, también progresa a buen ritmo y «este mismo lunes se incorporará el profesional que ha pasado un proceso de selección de Reus Mobilitat i Serveis (RMS) y que debe ayudarnos a activar los contratos y lo necesario para ver los primeros resultados», añade Berasategui. La intención, tal como se concretó en su momento, es poner en funcionamiento este servicio en 2023.
El de Blancafort, más cerca
En cuanto al carril bici con acera que debe conectar la urbanización Blancafort con la rotonda que enlaza el Santuari de Misericòrdia con la T-11, el presupuesto del proyecto se ha modificado y pasa de 963.079 euros a 1.178.892, siempre IVA incluido. La aportación municipal para la ejecución de las obras se mantiene tal como se pactó en la última actualización y será de 481.539,80 euros. Esto representa que el Ayuntamiento asuma un 40,85% del coste, y no el 50% del que se iba a hacer cargo en primera instancia. La intervención también dotará de drenaje la vía, largamente luchada por la Associació de Veïns de la Urbanització Blancafort mientras ostentó su presidencia Bartolomé Pluma. Ahora, Infraestructures deberá sacarlo a licitación para que se acabe materializando.
Por otro lado, el Ayuntamiento ha adjudicado este 2021 contratos para la redacción de un proyecto de carril bici entre las Oques y la universidad –14.900 euros y menos de tres meses de ejecución–; otro para la avenida de Riudoms, la avenida Sant Bernat Calbó y la rotonda de la T-11 con la T-3141 –14.475 euros y menos de tres meses–; y uno más que afecta a la avenida Sant Bernat Calbó, el barrio Montserrat y la avenida de Bellissens –14.490 euros y tres meses.
Consultado en este sentido, desde Reus Patina, Josep Maria Alcover, indica que «lo más importante es que haya continuidad en los carriles, que no queden tramos aislados por donde no se pueda circular tal como pasa ahora». En cuanto a la intervención en las Oques, Alcover valora que «habrá que afinarla para que sea segura porque es un punto céntrico que aún tiene buses y mucho tráfico, y se pone el mercado». El gobierno local se comprometió a destinar unos 442.000 euros de los presupuestos municipales de los próximos años a la materialización del Plan de la Bicicleta. Al montante hay que añadir 522.000 euros del Plan de Acción Municipal (PAM) de la Diputació de Tarragona, más lo que la Generalitat añade para Blancafort.
