Las calles de Reus, sumidas en obras

Coinciden al menos una decena de actuaciones que podrían sucederse hasta las elecciones municipales de mayo

25 noviembre 2018 14:44 | Actualizado a 25 noviembre 2018 15:16
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El tópico se repite y Reus vive sumida en las obras a pocos meses de las elecciones municipales del próximo mes de mayo. La oposición tilda de electoralista la planificación de las remodelaciones que se están llevando a cabo, mientras el gobierno asegura que se han iniciado cuando se han podido iniciar. Pero sea como sea, lo cierto es que la ciudad ha sido sitiada por las vallas y los operarios, lo que provoca algunas afectaciones al tráfico. 

En las últimas semanas han empezado varios proyectos importantes de remodelación en la vía pública. El más reciente, las obras de la plaza de la Sang que empezaron este pasado lunes y que suponen el colofón final al deseo del alcalde, Carles Pellicer, de dar un nuevo aire al entorno de la plaza de Catalunya. Unas obras, con un presupuesto que ronda los 500.000 euros, que prevén convertir el espacio en un gran circuito peatonal y sin ninguna plaza de aparcamiento. 

Un gran cartel situado en el arrabal, junto a las Peixateries Velles, alerta de las alteraciones en el tráfico que supone dicho proyecto. Y es que la circulación queda cortada en toda la plaza, y el servicio de movilidad de la Guàrdia Urbana desvía el tráfico por la calle Batàn, hasta la plaza de Villarroel, desde la que se puede conectar con la Riera Miró. 

Precisamente la plaza de Villarroel también ha sido remodelada. La rotonda, una de las más transitadas de Reus y que sirve de arteria desde la carretera de Bellissens y la de Tarragona para connectar con la zona del Carrilet y el centro de la ciudad, fue completamente rediseñada antes del verano. 

Las obras se han llevado a cabo a lo largo de varios meses, con sus correspondientes afectaciones en el tráfico. El resultado, es una rotonda con el sistema de cruces completamente normalizado (sin que en medio de la plaza los vehículos tengan que hacer un ceda el paso). Todo el proyecto de obras está listo y sólo queda por terminar la decoración y la jardinería. El proyecto también ha supuesto el cambio de sentido de la calle de Eduard Toda. 

Otro gran proyecto que se está desarrollando desde hace meses es la remodelación de la calle de Victòria, en la zona posterior de la calle Ample y de Prat de la Riba. Hace días que los vecinos se quejan de la lentitud de los trabajos, que los mantienen condenados a esquivar baches y agujeros, y a vagar entre vallas para encontrar el camino más cómodo para salir y entrar de casa todos los días. 
El proyecto contempla la retirada de todos los adoquines de la zona y la pavimentación y asfaltado de la calle y sus adyacentes, así como la renovación de las aceras. En esta zona también se ha tenido que reordenar el tráfico. 

Mejoras en aceras
Uno de los principales denominadores comunes a lo largo y tendido de las obras que se encuentran en ejecución en este mismo momento es la remodelación de las aceras y su renovación. 

Así pues, se están llevando a cabo mejoras en la avenida de la Salle, en la zona de la parada de autobús, justo después de la encrucijada con la avenida de Pere el Cerimoniós. En este punto se ha levantado por completo la acera existente para su sustitución. Las obras, como en casi todos los casos, también afectan el tráfico. En este caso se ha cortado un carril de la avenida. 
Más renovaciones de aceras. En la calle Balmes, en el tramo que conecta el pabellón de la escuela La Salle con la avenida de Jaume I. Hace meses que el suelo está levantado por completo y que unas vallas invitan a los peatones que no son vecinos a desviarse por la calle ubicada justamente en paralelo, la calle del Canal. Unas obras de mejora muy esperadas por los vecinos, que acusaban el mal estado de las aceras. 

Todas estas reformas en la vía pública han venido precedidas de otras tantas. En el barrio Sol-i-vista, por ejemplo, se ha puesto al día la zona de la calle de Entença i la de Roger de Llúria. Aunque los vecinos se han quejado de la lentitud de los trabajos. A su vez, los trabajos que se realizan estos días en Reus son la antesala de otro gran proyecto pendiente por el actual gobierno: la remodelación de la calle Alt de Sant Pere. Los vecinos ya están pagando las contribuciones especiales y se espera que los trabajos puedan empezar el próximo mes de enero.

Cañerías y colectores
No sólo el departamento de vía pública está activo a lo largo de estos días. También la empresa Aigües de Reus está llevando a cabo distintas obras de importancia en la ciudad. La más cuantiosa es el nuevo colector en la avenida de Sant Bernat Calbó, junto a la plaza del Canal. Aunque se trata de una inversión de la Agència Catalana de l’Aigua (ACA), estamos hablando de la principal inversión que se lleva a cabo actualmente y que ronda el millón de euros. Concretamente se está instalando una nueva cañería que permitirá sustituir la actual, que había quedado degradada. El mismo proyecto contempla una segunda fase que podría desarrollarse a lo largo del próximo año. Aigües de Reus también ha llevado a cabo, a lo largo de los últimos días, obras menores de reposición de cañerías en el Passeig Prim y en Països Catalans. 

Según el gobierno, las inversiones son las programadas en la planificación redactada en los presupuestos municipales de 2018, y aunque pueda parecer un movimiento electoralista, las fuentes consultadas aseguran que no se han podido llevar a cabo anteriormente por la indisposición presupuestaria. En total se habrá invertido durante el mandato alrededor de 12 millones.
Cabe recordar está previsto, antes de las elecciones del próximo mes de mayo, iniciar las obras de construcción de dos nuevos pabellones en sendas escuelas públicas de la ciudad. 

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