Los tres concejales de la CUP de Reus (Oriol Ciurana, Marta Llorens y Mariona Quadrada) investigados por un presunto delito de incitación al odio han plantado de nuevo a la magistrada del Juzgado de Instrucción número 2 de la ciudad. Los cupaires estaban citados a declarar, por segunda vez, después de no comparecer la semana pasada como sí hicieron el alcalde Carles Pellicer y el resto de concejales del Ayuntamiento de Reus investigados a raíz de la denuncia presentada por la Policía Nacional por los hechos ocurridos tras el 1-O.
Los tres ediles han asegurado a través de las redes sociales su voluntad de no comparecer ante la juez porque "no hemos cometido ningún delito". Su posicionamiento reafirma las declaraciones que efectuaron el pasado jueves ante las puertas del juzgado manifestando que "la justicia española no nos representa". La portavoz de la CUP, Marta Llorens, también añadió que la causa abierta es "una caza de brujas" y que "volveríamos a actuar de la misma forma".
➡️Avui no ens hem presentat a declarar als Jutjats de #Reus perquè mantenim que no hem comès cap delicte: obeïm la voluntat popular del poble català i hem exercit la llibertat d'expressió i el dret de manifestació! Seguim✊ pic.twitter.com/NhY9qt4V8a
— CUP Reus (@CUPReus) 29 de noviembre de 2017