Los ‘coworking’ ganan terreno en Reus ante la creciente demanda

La tendencia de los coworking está arraigando con fuerza entre la sociedad y en Reus se hace notar con cada vez más espacios y, los ya existentes, están ampliando instalaciones para poder atender la creciente demanda. Pero, ¿qué es exactamente un coworking? Se trata de espacios que acogen, bajo el mismo techo, a personas que desarrollan diferentes actividades empresariales, que no necesitan de una oficina para poder ejercer, pero que prefieren salir de casa y alquilar un pequeño espacio al lado de otros individuos.  

En 2011, Reus fue pionera en la demarcación en poner en marcha el vivero empresarial Redessa. Este modelo ha ido in crescendo y, actualmente, la ciudad dispone de una amplia oferta: desde pequeños espacios, como Tecnicoat –en la calle Mineta–, con capacidad para siete personas; a las 42 oficinas ofertadas por Multioficines MO, en la avenida La Salle, con más de 10 años. 

Las tendencias laborales cambian y muchos son los que han convertido su casa en puesto de trabajo, ya sea porque son autónomos, pluriempleados o ejercen profesiones liberales. Trabajar desde el hogar tiene ventajas, pero quienes lo han experimentado saben bien que este modelo tiene muchas carencias. «No te centras ni en el trabajo ni en las tareas de la casa. Cualquier cosa te distrae y, además, te sientes sola…», explica Clàudia Cànovas, diseñadora gráfica. 

«Nos hemos encontrado con tanta demanda, que ya estamos trabajando en la reforma de un nuevo local en la calle de Joan Rofes, donde habrá 12 plazas nuevas», explican Núria Rios y Carles Sanromà. Esta pareja reusense hace justo un año abrieron Espai Factoria, un coworking en el centro de Reus, en la Raval de Santa Anna, con, actualmente, capacidad para ocho personas (a la espera de la apertura del segundo local, que se prevé para este verano). 

Era Rios –dedicada al mundo del marketing digital– quien buscaba un coworking y, al final, terminó creando su propio espacio. «Quería que fuese reducido, estar rodeada de gente creativa para poder crear sinergias. Tuvimos la sensación que faltaba un espacio así en la ciudad, y  nos pusimos a trabajar», explican Rios y Sanromà, quienes destacan que rápidamente encontraron gente que ocuparon las plazas disponibles. «Inicialmente había siete mesas, una de ellas, para Núria, pero ante la demanda, buscamos la fórmula para incorporar un octavo puesto», explican. Un año más tarde, los trabajos de remodelación de un segundo local están en marcha: «Tenemos la suficiente capacidad para coordinar dos coworkings. Apostamos porque sean espacios abiertos con el objetivo de crear comunidad, unos lazos que vayan más allá del espacio de trabajo. Es por este motivo que también organizamos charlas y otras actividades».

Espacios consolidados

Tecnicoat es otro ejemplo de espacio coworking en Reus. Hace 4 años que está en funcionamiento, «y alberga perfiles profesionales muy distintos, como arquitectos, ingenieros, programadores informáticos...», explica Pierre Grubius. Es también un espacio pequeño con capacidad para siete personas con el objetivo de «crear sinergias».

Por otro lado, Multioficines MO dispone de 42 oficinas, «todas llenas y con clientes que están con nosotros desde que abrimos, hace ya más de 10 años», explica la responsable Dolors Llorens. Asegura que la demanda es creciente y considera que la «crisis ha influenciado mucho». «Hay, sobretodo, jóvenes empresarios, autónomos, pequeños empresarios...», dice Llorens, que apunta como la calve del éxito el hecho «de alquilar un espacio con todas las herramientas ya disponibles que empezar de cero en un local propio».