Los vecinos de Reus quieren cámaras pero también policía patrullando las calles

Siete nuevas zonas de Reus estarán bajo la atenta mirada de cámaras de videovigilancia. Este es el anuncio que justo la semana pasada lanzaba el alcalde Carles Pellicer y que, ahora, muchos vecinos recogen a buen gusto, pero con una advertencia: «Hacen falta más policías patrullando a pie las calles». El plan tiene por objetivo incrementar la sensación de seguridad entre la ciudadanía en zonas donde se han detectado focos conflictivos o de concentración de gente, como es el caso de las calles de Jesús y del Vent, plaza de la Cultura de la Pau, calle de la Sardana y plaza Comte de Reus, pasaje de la Mare de Déu de la Macarena, plaza Teresa Miquel i Pàmies, plaza de Anton Borrell y pista deportiva de la calle Llorenç Milans del Bosch. Estos son los ejes donde se ubicarán las nuevas cámaras.

La medida se toma después que algunos barrios hayan pedido implantar estos dispositivos, hartos de ver en su día a día innumerables actos incívicos. Así lo constata el presidente de la Associació de Veïns del Barri del Carme, Josep Machado, que subraya que se trata de una larga reivindicación. En el Carme se prevé ubicar el sistema de vigilancia en la zona de las calles de Jesús y del Vent. «Pero veremos cuantas cámaras ponen, porque con un solo dispositivo no arreglaremos nada. Lo ideal sería que el Ayuntamiento pidiera a los vecinos opinión y poder trabajar conjuntamente para poder encontrar una solución real», expone Machado. 

El presidente de los vecinos del Carme subraya, entre las principales problemáticas del barrio, los robos y los okupas. En su opinión, las cámaras de videovigilancia pueden contribuir a disuadir toda esta problemática que, asegura, «solamente hace falta sentarse en la terraza de un bar durante un rato para ver todo lo que se cuece en esta zona», añade. Aun así, a Josep Machado no se le escapa que las cámaras no hacen todo el trabajo. «Faltan efectivos policiales. No se los ve por la calle. Antes patrullaban parejas de Guàrdia Urbana y Mossos d’Esquadra y ahora este servicio se ha perdido», lamenta.

Desde otra zona de la ciudad, Josep Lluís Nieto, presidente de la asociación vecinal de Horts de Miró, valora muy positivamente la instalación de cámaras en las calles y también subraya que se trata de una reclamación que se había hecho desde el barrio. En su opinión, estos dispositivos «colaborarán a que haiga más civismo». Además, Nieto está de acuerdo en la falta de agentes policiales de proximidad.

En Mas Abelló «todo sigue igual»

Éstas no serán las primeras cámaras de videovigilanca que Reus pone en marcha, sino que fue a finales de 2017 que esta medida de seguridad entró en funcionamiento en el barrio de Mas Abelló. El alcalde Carles Pellicer destacaba la semana pasada los buenos resultados de este sistema de vigilancia. No obstante, hay opiniones distintas al respeto.

Ayer por la mañana, un grupo de vecinos debatía sobre el tema mientras esperaban que llegase el bus urbano para acercarse al centro. «Hay cámaras desde hace más de un año y nada ha cambiado. Siguen pasando droga delante de mi casa», criticaba una vecina. Otra comentaba que «al menos alguien debería mirar las imágenes, que vean lo que pasa y se actúe porque el incivismo sigue, y les da igual si hay una cámara. Saben que no les pasará nada y con un rápido movimiento de manos pasan las sustancias», denuncia esta vecina. En el pequeño debate improvisado en la parada del bus de Mas Abelló, todos los vecinos coincidieron en la necesidad de reforzar la presencia policial a pie de calle. Aun así, un vecino que vive justamente en el pasaje de la Mare de Déu de la Macarena (donde el nuevo plan prevé colocar una nueva cámara) se mostraba poco esperanzado. «Da igual la vigilancia. El incivismo seguirá», opinaba.

La nueva cámara de Mas Abelló y la del eje calle del Vent y de Jesús serán los primeros dispositivos que entrarán en funcionamiento con este nuevo plan. Forman parte de la primera fase, con un presupuesto de 15.000 euros. Paralelamente, el Ayuntamiento está tramitando las autorizaciones pertinentes ante la Comissió de Control de Dispositius de Videovigilància de Ctalunya y el Departament d’Interior para poder ubicar el resto de dispositivos previstos.