Los vecinos del barrio Niloga esperan finalizar las mejoras de las plazas

El Niloga es uno de los barrios céntricos con más historia de la ciudad. Angelina Pla es una de las vecinas que ha vivido su profunda transformación. No en vano lleva unos 15 años al frente de la Associació de Veïns 25 de Setembre. Durante todo este tiempo, una de las acciones más exitosas para la convivencia de los vecinos que recuerda fue cuando se cerraron las galerías de paso de los edificios. Fue una actuación que se llevó a cabo en el año 2010 para terminar con los problemas de inseguridad y la suciedad que acumulaban. Desde entonces, explica Angelina Pla, se han ido desarrollando pequeñas mejoras urbanísticas en las aceras, las jardineras y sus distintas plazas.

Tras la mejora de la plaza ubicada en la calle General Moragues, desde la entidad vecinal aseguran que están en conversaciones con el Ayuntamiento para finalizar las mejoras en el espacio situado en la calle Bernat de Cabrera. Éstas consistirían en el repintado de las paredes y el cambio de las baldosas. «La intención es que esté listo el mes de junio, antes de las fiestas del barrio», subraya la presidenta vecinal.

Más allá de esta actuación pendiente, los residentes están satisfechos con las últimas mejoras urbanísticas realizadas. Muchas de ellas centradas en el arreglo de las aceras, instalación de bancos en la vía pública y reforma de los jardines. Eso sí, en lo que coinciden varios de los vecinos es en pedir al consistorio más mano dura contra los dueños de perros incívicos. Cabe recordar que hace unas semanas se ha iniciado una campaña para erradicar esta modalidad de incivismo aumentando el control de la Guàrdia Urbana.


Vida de barrio
El Niloga empezó como una zona que agrupaba los edificios con sus características galerías de paso y los chalets de la zona del Reus Deportiu. Pero con los años se ha ido ensanchado hasta incluir desde la carretera de Castellvell, la avenida 11 de Setembre y la calle Gaudí.

«Es como un pequeño pueblo donde todo el mundo se conoce. La verdad es que tengo clientes de toda la vida». Xavi Cañelles lleva unos 20 años al frente de la tienda Ràpid Niloga, un comercio especializado en reparación de calzado y copia de llaves. Otro de los negocios con más años de implantación es la Llibreria La Bruixa que regenta Loles Morales. En ambos casos, al igual que muchos otros residentes, afirman que es un barrio de perfil residencial y muy tranquilo.